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Comerciantes ambulantes del primer cuadro de la Ciudad de México, empiezan a resentir los estragos de la Cuarta Transformación.
Por mensajes de las autoridades conocen que van a ser reordenados, pero no saben cómo y por qué.
En diferentes ocasiones han ido a tocar puertas, pero estas solamente se abrieron para anunciarles que durante este mes será puesto en marcha un plan de reordenamiento en los perímetros “A” y “B” en que está dividido el centro.
Las propuestas de los comerciantes no son tomadas en cuenta para trabajar conjuntamente y llevar a cabo una reordenamiento en paz.
Quienes se dedican a la venta de artículos varios en la vía pública, reclaman que el Gobierno les cumpla el reordenamiento que se inició en 2007 con Marcelo Ebrard, que quedó incompleto, porque el compromiso fue la entrega de plazas comerciales y apenas fueron entregadas unas cuantas.
Como una acción de buena fe, los ambulantes anunciaron que están dispuestos a pagar impuestos por los espacios que ocupan, pero que esos recursos económicos sean utilizados para mantenimiento de las calles.
De entrada, apoyan la política del Gobierno de la Ciudad de México, lo único que están solicitando es que sean tomadas en cuenta sus propuestas en donde todos salgan ganando, autoridades, ciudanía y autoridades. Qué tal!