Síguenos

¿Qué estás buscando?

Voces

Latrocinios en Guerrero

47 lecturas

Por Eduardo López Betancourt

Ante la inminente salida de quienes hoy detentan un mal gobierno en el estado de Guerrero, se aplica con puntualidad aquella conocida Ley de Hidalgo, resumida en la cínica máxima: “tonto el que deje algo…”.

Existe un ente de carácter prácticamente fantasmagórico, concebido para el despojo: el llamado Fideicomiso Acapulco. En sus orígenes tuvo naturaleza federal; actualmente es administrado por la entidad suriana, aunque, como era de esperarse, se encuentra en manos de amistades y allegados, con el único propósito de cometer tropelías. Dos acontecimientos recientes han evidenciado la perversidad de quienes encabezan este organismo espurio.

El primero se relaciona con la venta irregular de terrenos, mediante la creación de fraccionamientos en uno de los pocos y más importantes pulmones naturales del puerto: el Parque Nacional El Veladero, reserva ecológica de más de tres mil hectáreas, decretada como área protegida el 17 de julio de 1980 con el objetivo de preservar su biodiversidad. En dicha zona habitan especies únicas, como el águila pescadora, así como flora excepcional, entre la que destaca el llamado árbol morado.

Resulta profundamente indignante que estos personajes del Fideicomiso Acapulco fraccionen de manera descarada áreas de alto valor ambiental, devastando ecosistemas, destruyendo vegetación esencial y afectando gravemente la fauna silvestre. Los predios se comercializan en montos superiores al millón de pesos, pese a carecer de servicios básicos, lo que agrava el ya lamentable deterioro ecológico que padece el puerto.

Lejos de cumplir con su supuesta misión de impulsar el desarrollo y la recuperación de Acapulco, dicho organismo ha optado por convertirse en un vulgar fraccionador. La misma práctica se reproduce en el histórico Club de Golf de Acapulco, hoy sumido en el abandono, con consecuencias especialmente graves para la vida silvestre: numerosos venados han sido sustraídos y comercializados por los mismos individuos que hoy administran el lugar.

La presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo, ha reiterado su respaldo al puerto en un esfuerzo por lograr su recuperación. No obstante, pese a los miles de millones de pesos canalizados para tal fin, los resultados visibles son escasos en lo que alguna vez fue un centro turístico de primer orden.

El saqueo, el abuso y el manejo inmoral de los recursos públicos han sido una constante, ahora agravada por los daños irreversibles que se ocasionarán tanto al Parque Nacional El Veladero como al Club de Golf de Acapulco.

Te puede interesar

Advertisement