Visitas
Auditorías y testimonios revelan que hospitales y clínicas de la petrolera operan con equipo obsoleto, desabasto y registros incompletos, mientras el presupuesto sigue a la baja
Fernando Ortiz
Ciudad de México.- Los servicios de salud destinados al personal de Petróleos Mexicanos (Pemex) presentan un deterioro que afecta a cientos de miles de trabajadores y sus familias, esta situación refleja un desgaste acumulado durante años.
En su Plan Estratégico de Salud 2020-2024, la petrolera reconoció la existencia de serias deficiencias internas y diversas amenazas externas que comprometen el funcionamiento de sus unidades médicas, incluso el índice de satisfacción disminuyó, ya que, en 2019 se ubicó en 91 %, cifra inferior al 94 % reportado al finalizar la administración anterior.
El surtimiento de recetas también experimentó un retroceso evidente, entre 2016 y 2018 se mantenía por encima del 87 %, llegando incluso al 100 %, pero para 2019 cayó a 73.9 %, a pesar de ello, el indicador fue suprimido del plan de salud para el periodo 2020-2024.
La estrategia gubernamental planteó ajustes financieros y operativos ante un entorno de precios bajos del petróleo, mientras Pemex aseguraba que fortalecería la calidad del servicio y garantizaría atención adecuada, sin embargo, seis años después, quirófanos y áreas médicas en diversas unidades siguen mostrando fallas críticas por falta de mantenimiento.
La Plataforma Nacional de Transparencia reveló el deterioro, en el Hospital General de Veracruz, por ejemplo, se operó en 2024 con equipo obsoleto y sin espacio suficiente para pacientes postoperatorios, y para 2025 solo uno de los dos quirófanos es funcional debido a problemas de iluminación y mantenimiento.

Otros hospitales viven situaciones similares, como lo es en Huauchinango, Puebla, el único quirófano está inhabilitado por fallas en la mesa quirúrgica, en Salamanca, Guanajuato, solo tres de cuatro quirófanos están en servicio por daños en la lámpara quirúrgica y limitaciones de la mesa manual.
En el Hospital Central Norte, en la Ciudad de México, dos de cinco quirófanos no funcionan por falta de equipo adecuado y en Salina Cruz, Oaxaca, uno de los dos quirófanos opera con serias limitaciones por la ausencia de mantenimiento.
La Auditoría Superior de la Federación también detectó irregularidades en 2024, aunque se entregaron más de 8.1 millones de medicamentos, más de 140 mil registros carecían de información básica sobre el nivel de atención al que correspondían.
Según el Manual de Procedimientos vigente desde 2022, el derechohabiente tiene 72 horas para adquirir el medicamento y hasta 60 días para recibir el reembolso, sin embargo, trabajadores aseguran que el pago suele realizarse al límite del plazo y que los trámites son tan burocráticos que muchos desisten de solicitarlo.
Pemex afirmó que ha fortalecido el abastecimiento y que, cuando una farmacia no tiene existencias, se recurre a farmacias externas o al reembolso, no obstante, testimonios y reportes oficiales muestran que estos mecanismos no siempre funcionan adecuadamente, lo que obliga a miles a buscar atención privada.
En diciembre de 2024, los servicios médicos de Pemex atendían a más de 644 mil derechohabientes, cifra que podría aumentar a 800 mil para 2030, aunque existen 60 unidades médicas y casi 73 mil trabajadores en la red de salud, persisten vacantes en puestos clave y fallas en infraestructura.

Una evaluación de la Auditoría Superior de la Federación en octubre de 2025 detectó información incompleta sobre infraestructura, recursos humanos y servicios prestados.
También señaló la ausencia de evidencia que justificara contratos o ampliaciones en equipamiento, así como la falta de indicadores para medir la suficiencia de las instalaciones.
Durante 2024, Pemex registró más de 4.5 millones de consultas, 53 mil hospitalizaciones, cientos de miles de procedimientos y más de 22 millones de estudios de laboratorio, sin embargo, en una parte importante de esos registros no se especificó el nivel de atención correspondiente.
El presupuesto para los servicios médicos también sufrió una reducción del 7 % en 2024, y las proyecciones para 2025 y 2026 no anticipan incrementos significativos, con recursos limitados y problemas estructurales no atendidos, las posibilidades de una mejora sustancial en la atención médica de Pemex parecen remotas.