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Por Ana María Vázquez
Escritora/Dramaturga
@Anamariavazquez
¿Quién al día de hoy puede dudar de la importancia del agua?, a lo largo de varias columnas he documentado extracciones ilegales, robo, acaparamiento y leyes a modo en favor de unos cuantos; la actual industria de la Inteligencia Artificial, conductores y semiconductores y las empresas como Femsa, y Nestlé, se han vuelto los grandes acaparadores, pero no los únicos, la Ley de Aguas de Peña Nieto dio manga ancha a terratenientes y huachicoleros de agua, dejando poblaciones enteras en sequía; por otro lado, la escasez de revisores, nula regulación y leyes estatales laxas favorecieron lo que hoy los acaparadores llaman “derechos adquiridos”.
Ante ello, en este sexenio la presidenta Sheinbaum envió a la Cámara una nueva ley, más justa, más equilibrada y comenzaron las brigadas de revisión, la idea es que la nueva ley pasara sin una coma, pero ahora ante el amago de grupos de transportistas que exigen su “derecho ancestral”, el primero en recular, ha sido -¿por qué no me extraña?- Ricardo Monreal, el mismo que puso a Sandra Cuevas y quiso imponer a su hija en la alcaldía Cuauhtémoc, el mismo terrateniente zacatecano que no pudo juntar un puñado de votos para su fallida candidatura presidencial, el mismo que maneja el senado a su antojo, que publica con cargo al erario libros de “regalo” ponderando -su según él- su excelente trayectoria política, el mismo que se ha servido del poder con la cuchara grande.
¿Por qué sigue ahí?, nos preguntamos todos, en su más reciente declaración porque él declara para todo, le encantan los reflectores- ha sido asegurar que la ley de aguas se modificará “con puntos y comas”, enfrentándose directamente a la orden presidencial, e instando a la secretaria de Gobernación Rosa Icela Rodríguez al diálogo, ¿le parecen pocas más de 300 mesas de diálogo? Evidentemente a él, como terrateniente le afecta en particular esta ley, pero al mismo tiempo, el guiño a los grupos de intermediarios y personeros del PRIAN que se “manifiestan” es más que evidente, un hombre que no da “paso sin huarache” y que entiende claramente que el agua, es un gran, gran negocio. Gente muy poderosa como Fox u Olga Sánchez Cordero, privilegiados de sistemas anteriores deben estar muy a favor de las decisiones de Monreal. ¿Hasta cuándo seguirán estas lacras representando falsamente al partido cuando solo están para representarse a sí mismos?
