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Pese a las sanciones de la Profeco y revisiones, las plataformas mantienen la modalidad de cuotas adelantadas a los usuarios
Omar Montalvo
Ciudad de México. – Las aplicaciones del servicio de taxi como Uber y Didi tienen casi 10 años de operación en el país y desde entonces mantienen el modelo de cobrar a los usuarios antes de terminar los viajes, distinto al de los taxis del transporte público en los que el cobro se hace al final. Según ha dado a conocer la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), este método es sancionable, ya que viola el principio de claridad en los precios de productos y servicios que marca le Ley Federal de Protección al Consumidor (LFPC), pero las compañías mantienen este modelo a pesar de las multas ordenadas.
La LFPC en su artículo siete establece que todo proveedor de algún servicio está obligado a informar y respetar los precios, lo que no cumplen aplicaciones como Uber y Didi con cobros anticipados, cargos adicionales al terminar el viaje, y en los últimos meses con el aumento del siete por ciento en las tarifas que anunció Uber sin notificar a los usuarios. La normativa también establece en su artículo cinco, que cuando los cobros se hacen con tarjetas de crédito o débito, la entrega del bien y servicio se debe hacer al momento, no antes como ocurre con los viajes por aplicación.
Por la manera en que operan las aplicaciones de taxi en el país, la Profeco ha considerado en varias ocasiones que se tratan de prácticas sancionables. Uber ingresó en México en 2013, pero fue hasta 2015 que se empezó a regular este servicio. Con la entrada de Didi en 2018, el servicio de taxi se disparó, pero también la Profeco alertó que varias compañías se aprovecharon de cláusulas engañosas, por lo que ordenó multas por 6 millones 484 mil pesos, dónde a Uber le correspondieron 3 millones de pesos. Desde entonces la plataforma de Uber, ante reclamos de usuarios solicita que primero dirijan la queja ante la empresa en lugar de la autoridad federal.
La Ciudad de México también hizo verificaciones a las aplicaciones. Entre 2018 y 2020 la Secretaría de Movilidad (Semovi) y el Instituto de Verificación Administrativa (INVEA), realizaron operativos a choferes de aplicación, que resultó en 41 sanciones por no garantizar la seguridad de los pasajeros, más el hallazgo de que sólo 143 conductores tenían licencia especial para autos por aplicación. Estas revisiones no se han retomado debido a un amparo de Uber.
