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Habitantes de San Francisco Tlalcilalcalpan bloquearon la avenida Lerdo frente a Palacio de Gobierno, exigen acelerar la excavación para extracción del líquido
REDACCIÓN
La falta de agua volvió a empujar a los habitantes de San Francisco Tlalcilalcalpan en Almoloya de Juárez a las calles del centro político del Estado de México. Desde temprano, decenas de familias se congregaron frente a Palacio de Gobierno para exigir a las autoridades estatales una solución inmediata al severo desabasto que enfrentan, una crisis que ha obligado a miles de hogares a depender exclusivamente de pipas privadas y contenedores improvisados.
La manifestación terminó por bloquear la circulación en avenida Lerdo, convertida en el principal punto de presión del movimiento.
Los inconformes reclaman un compromiso firme para iniciar la perforación de cuatro pozos profundos que permitirían garantizar el suministro para unas cuarenta mil personas distribuidas en trece comunidades de Almoloya de Juárez.
Los líderes comunitarios explicaron que la gestión para lograr este proyecto lleva más de un año navegando entre trámites, ventanillas y mesas técnicas, que no han resuelto nada. Por ello, exigen que sea la gobernadora Delfina Gómez Álvarez quien encabece el proceso y destrabe las autorizaciones pendientes.
Voceros del Consejo Mayor de Gobierno Popular señalaron que la crisis hídrica alcanza su punto más crítico durante el estiaje, cuando una pipa de agua puede costar entre mil quinientos y dos mil pesos, gasto que muchas familias no pueden asumir sin sacrificar alimentos u otros servicios básicos. La situación se vuelve insostenible en comunidades agrícolas como La Herradura, Bellavista, Rancho Viejo, Cañada de Guadarrama, San Isidro y Loma de San Francisco, donde la falta de agua golpea también la producción local.
El proyecto hídrico, sostienen los dirigentes, requiere una inversión aproximada de treinta millones de pesos, pues cada pozo profundo demanda estudios de factibilidad, equipamiento especializado y sistemas de distribución complementarios.
Tras varias horas de cierre vial y diálogo tenso, funcionarios estatales acordaron crear una mesa tripartita en la que participarán representantes del gobierno estatal, CONAGUA y delegados comunitarios.
