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Minimizar lo ocurrido en el Centro Histórico, equivale a negar una realidad que afecta a millones de mujeres en el país
Juan R. Hernández
Ciudad de México.- La denuncia pública de acoso realizada por la presidenta Claudia Sheinbaum reactivó el debate nacional sobre la violencia contra las mujeres, en un país donde el 70.1% de las mexicanas de 15 años o más ha sufrido algún tipo de acoso o agresión sexual, según cifras del INEGI. A nivel regional, la Organización Mundial de la Salud estima que una de cada tres mujeres en América Latina padece violencia física o sexual.
En entrevista con Diario Basta, la vicecoordinadora de Morena en el capitalino, Brenda Fabiola Ruíz, expresó su respaldo a la mandataria y condenó la normalización del acoso. “Es indignante. Lo vivimos todas: en el transporte, en las calles, en las redes. No se trata de un caso aislado. El 70% de las mujeres hemos sido víctimas de acoso. Esa es la realidad que enfrentamos todos los días”, afirmó.
Ruíz Aguilar lamentó que aún haya voces que minimizan o se burlan de los hechos. “Es todavía más indignante que haya mujeres que crean que esto es un montaje. Eso también es violencia”, enfatizó. Celebró la decisión de Sheinbaum de presentar una denuncia formal y anunció que impulsará campañas informativas para que las mujeres sepan que no están solas y que el acoso es un delito.
La abogada penalista y activista de derechos humanos Mina Moreno coincidió en que lo ocurrido debe calificarse como una agresión sexual. “Minimizarlo equivale a negar una realidad que afecta a millones de mujeres”, señaló.
Recordó que la ONU define la violencia contra las mujeres como cualquier acto que cause daño físico, sexual o psicológico, incluso en espacios públicos. “No importa el cargo que se ostente: las agresiones persisten, y eso debe cambiar”, dijo. Citó a Simone de Beauvoir: “El feminismo es una forma de vivir individualmente y de luchar colectivamente”.
Por su parte, la diputada Ana Buendía consideró que el incidente refleja una violencia estructural todavía normalizada. “Lo que vivió la presidenta lo vivimos muchas. No llegó sola, llegamos todas”, expresó. Propuso reforzar la educación y sensibilización social desde los territorios, porque “muchas mujeres ni siquiera reconocen que han sido violentadas”.
Las tres voces coincidieron en un mensaje de fondo: la presidenta no está sola, y ninguna mujer en México debería estarlo. “Seguiremos en la lucha, con respeto y firmeza. No vamos a tolerar más la cultura del acoso ni la burla hacia las víctimas”, sentenció Buendía.
