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Las alcaldías con mayor incidencia en este delito fueron Iztapalapa, Cuauhtémoc, GAM, Álvaro Obregón y Coyoacán
Juan R. Hernández
Ciudad de México.- Durante los primeros nueve meses de 2025, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) registró 516 carpetas de investigación por el delito de abandono de personas, de acuerdo con el Boletín Estadístico de la Incidencia Delictiva en la Ciudad de México (enero-septiembre 2025). La cifra representa un incremento sostenido respecto a 2024 y confirma que, aunque se trata de un delito poco visible, continúa siendo una problemática social en aumento.
De enero a septiembre, los reportes mensuales fueron los siguientes: enero (57), febrero (60), marzo (72), abril (63), mayo (56), junio (65), julio (60), agosto (54) y septiembre (29). En total, las denuncias por abandono de persona promediaron 57 casos mensuales, lo que equivale a casi dos denuncias diarias en la capital del país.
Las cinco alcaldías con mayor incidencia en este delito fueron Iztapalapa, Cuauhtémoc, Gustavo A. Madero, Álvaro Obregón y Coyoacán, demarcaciones que concentran también los niveles más altos de delitos contra la vida y la integridad corporal. En conjunto, estas alcaldías acumulan alrededor del 60% de las carpetas iniciadas por abandono de personas en la Ciudad de México durante el periodo analizado.
En Iztapalapa, la FGJCDMX documentó el mayor número de denuncias, principalmente relacionadas con abandono de adultos mayores y personas con discapacidad. En Cuauhtémoc, los casos se vinculan con personas en situación de calle y omisiones de cuidado por parte de familiares o responsables legales.
En Gustavo A. Madero y Álvaro Obregón, las autoridades observaron un repunte de casos en zonas populares, mientras que en Coyoacán destacan denuncias por abandono de menores.
El boletín estadístico advierte que los delitos de abandono de persona se clasifican dentro del rubro de “Delitos contra la vida y la integridad corporal”, junto con lesiones y homicidios, lo que refleja la gravedad del acto al poner en riesgo la salud o la vida de la víctima.
Aunque la incidencia de este delito es menor en comparación con otros de alto impacto, especialistas consideran que su incremento debe ser atendido con una estrategia social y preventiva que incluya acompañamiento psicológico, asistencia social y fortalecimiento de redes de apoyo para adultos mayores, enfermos y menores en situación de vulnerabilidad.
Con 516 investigaciones abiertas en lo que va del año, el abandono de personas emerge como un reflejo de fracturas familiares, desigualdad social y desatención institucional, factores que demandan políticas integrales más allá del ámbito penal.