Visitas
Florencio, un adulto mayor de 69 años, murió tras ser atropellado por un vehículo negro en la carretera Toluca-Zitácuaro, a la altura de El Jacal, en Villa de Allende
REDACCIÓN
GRUPO CANTÓN
La tragedia volvió a teñir de luto la carretera Toluca-Zitácuaro. Florencio, un hombre de 69 años conocido entre los vecinos de la comunidad de El Jacal, perdió la vida al ser embestido por un automóvil negro que, tras el impacto, huyó sin detenerse.
El atropello ocurrió la tarde del domingo, en un tramo sin alumbrado ni señalización, donde los peatones arriesgan la vida a diario para cruzar. De acuerdo con los primeros reportes, el adulto mayor caminaba rumbo a su domicilio cuando intentó atravesar la vialidad.
En cuestión de segundos, el vehículo lo impactó violentamente y lo lanzó varios metros. Testigos corrieron a auxiliarlo mientras llamaban a los servicios de emergencia, pero los paramédicos solo pudieron confirmar su muerte.
Habitantes de El Jacal, consternados por el hecho, exigieron medidas urgentes. “Este camino es un peligro desde hace años, pero las autoridades solo prometen. Aquí ya han muerto muchos, y parece que nadie escucha”, denunció doña Carmen, vecina del lugar.
Otro residente, Javier Mendoza, apuntó con indignación: “No queremos condolencias ni comunicados; queremos puentes peatonales, topes y patrullas. No más muertes por negligencia.”
La carretera Toluca-Zitácuaro es una de las más peligrosas del sur del Estado de México, con múltiples accidentes provocados por el exceso de velocidad, el mal estado del asfalto y la falta de infraestructura vial. En el tramo de Villa de Allende se han registrado varios atropellamientos en lo que va del año, la mayoría con víctimas mortales.
Elementos de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, acudieron para realizar el levantamiento del cuerpo y abrir la carpeta de investigación correspondiente. Mientras tanto, vecinos colocaron veladoras en el sitio del accidente en memoria de Florencio. “Ya no queremos más cruces pintados, queremos soluciones reales”, repitieron entre lágrimas.
