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Madrugada de terror y ambulancias cuando un autobús de la línea Sur impactó contra un tráiler de carga en la carretera México-Cuautla, a la altura de Tepetlixpa
REDACCIÓN
GRUPO CANTÓN
Un nuevo percance vial volvió a teñir de tragedia la carretera federal México-Cuautla. En los primeros minutos del domingo un autobús de la línea Sur, que se dirigía a la Ciudad de México, chocó violentamente por alcance contra un tráiler de carga en el kilómetro 41, justo antes de la caseta de Tepetlixpa.
El saldo fue de 16 pasajeros heridos, entre ellos cuatro en condición crítica.
De acuerdo con los reportes preliminares, el conductor del autobús habría perdido el control al quedarse dormido, provocando que la unidad se estrellara contra la parte trasera del tráiler.

El golpe fue tan fuerte que la parte frontal del camión de pasajeros quedó destrozada, mientras los ocupantes salieron proyectados contra los asientos y ventanas. “Solo escuchamos un golpe seco y después los gritos. Fue una escena horrible”, relató Rodrigo Mendoza, vecino de San Miguel Nepantla, quien fue de los primeros en acercarse para ayudar.
Los cuerpos de emergencia de Tepetlixpa y Amecameca, arribaron minutos después para rescatar a los heridos, algunos atrapados entre los asientos retorcidos.
Paramédicos de Protección Civil y Cruz Roja realizaron maniobras de estabilización y traslado hacia hospitales de la región, mientras elementos de la Guardia Nacional cerraban por completo la vialidad.

Durante más de una hora, el tránsito permaneció detenido en ambos sentidos, generando largas filas de vehículos y caos en los accesos. CAPUFE informó que la circulación se reabrió parcialmente hacia las 7:30 de la mañana, aunque con reducción de carriles por las maniobras de remolque y limpieza.
La comunidad de San Miguel Nepantla expresó su preocupación por el incremento de accidentes en ese tramo. “No es la primera vez que pasa algo así, cada mes hay choques por exceso de velocidad o por falta de iluminación”, comentó doña Guadalupe Hernández, comerciante de la zona. Los vecinos demandan mayor vigilancia y señalización, pues consideran que la carretera se ha vuelto un riesgo constante.