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La cantante Carmen María de Tijuana, triunfó en el concurso y pasó a la final.
Por Gaby Gazcón
Grupo Cantón
Ciudad de México. El fin de semana se llevó a cabo la quinta semifinal de “México Canta por la paz y contra las adicciones”, esta vez participaron ocho cantautoras y cantautores por la región centro de México para buscar un lugar en la final el próximo 5 de octubre en El Teatro de la Ciudad.
Esta vez, la iniciativa del Gobierno de México de incitar a la creación de narrativas musicales, alejadas de la apología de la violencia, y el fortalecimiento de los géneros tradicionales, fue amadrinada, por una luchadora de los derechos de las mujeres, Vivir Quintana, cantautora de narrativas sonoras actuales que interpretó “Vivir son miedo” que es el himno de las protestas feministas.
Después el jurado — entre los que estaba Roberto Guadarrama, de Los Bukis– de la quinta semifinal del primer concurso binacional México Canta por la Paz y contra las Adicciones, dictaminó que Carmen María, de Tijuana, Baja California, con “Ahí pa´la otra”, pasa a la final. “Es una voz que hace sentir muchas cosas”, afirmó el jurado Fernando Rivera Calderón, acompañado por Regina Orozco y América Sierra.
La joven recomendó a las mujeres: “vida hay solo una; hay que seguir al corazón y hacer todo por vivir nuestra pasión.”
EL CONCURSO:
Iniciaron con la cantante de Chiconocuatla, Puebla, ella es de un mariachi de Garibaldi: Yannet Solares, de 29 años, quien interpretó con aires vernáculos “En el fondo”. La intérprete comentó que “las (mariachis) de antes la tenían más difícil, dejando al hijo encargado… ahora tenemos espacios abiertos, por lo que nos toca seguir poniendo en alto el mariachi, con una buena falta y ganas”. Vivir Quintana, quien recordó que la conoció en ese lugar de la CDMX, mostró su beneplácito de verla ahí.
De Cuautitlán Izcalli llegó el “cursi y alegre” de Oswaldo Ramírez, de La Tripulación del Capitán Milou con su fusión de pop, balada y norteño, con su tema, Rosita. “La vida es como navegar: a veces aguas tranquilas y otras tormentosas”, comentó.
Siguió Natáliyah Bravo de Arandas, Jalisco, una autodidacta que canta desde pequeña, y aprendió piano para mostrar sus creaciones. Cantó “El Bardo”, que escribió pensando en su papá. Regina Orozco, conmovida, recordó al suyo. Le dijo que tiene una voz “muy trabajada”, y que su papá le “salude al suyo” donde estén
De Iztapalapa apareció Efe Baby con 1ro de abril, estilo género urbano. Un joven que dijo, que abandono el trabajo godín para dedicarse a rapear en microbuses, hacerse adicto a la droga, salir y ahora tener rolas que tienen muchas reproducciones en Spotify.
De Guadalajara, Andrea Bayardo cantó “Alas a los alacranes”, y denunció entornos violentos, considera la cantante. Le gustó a Vivir Quintana; la invitó a su show que tendrá en el Teatro de la Ciudad el 9 de octubre.
El grupo de Toluca 17/89 interpretó Desfile. Rock con sabor regional. Y David Lamas de Villanueva, Zacatecas, hijo de un mariachi, padre de una familia musical, interpretó Pídeme, de Pedro Mota. El joven agradeció a su papá inculcarle la música desde pequeño.
Tras esta quinta semifinal, el 21 de septiembre se celebrará la sexta fase, dedicada a la región Sur, y el 28 de septiembre se emitirá una recapitulación con los momentos más destacados de todas las etapas previas.
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