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Familiares de personas encarceladas injustamente se manifestaron en la capital mexiquense con la protesta denominada “Gritos de la Libertad” piden por los suyos
REDACCIÓN
GRUPO CANTÓN
Integrantes del colectivo Haz Valer Mi Libertad recorrieron el Centro de Toluca en una marcha bautizada como “Gritos de la Libertad”, la protesta tuvo como eje central, la exigencia de liberar a personas presas injustamente, encarceladas por delitos fabricados y víctimas de un sistema judicial que según los manifestantes privilegia la corrupción por encima de la justicia.
En sus redes sociales María Luisa Montoya García, vocera del colectivo, señaló que, aunque existen mesas de trabajo, los avances son mínimos y los procesos se reinician cada vez que hay cambios en las instituciones.
“Con el relevo en la Comisión de Derechos Humanos, y la llegada de nuevos jueces y magistrados, los expedientes vuelven a empezar de cero. Eso significa retrasos que niegan la libertad a quienes son inocentes”, advirtió.
Uno de los casos expuestos fue el de Tomás Gabriel Crisanto, quien lleva 13 años en prisión en Almoloya de Juárez por un homicidio que, aseguran, no cometió. Pese a que el verdadero responsable se entregó, Tomás permanece encarcelado.
“Esto demuestra que en el Estado de México la justicia es para quien puede pagarla”, reprochó Montoya García.
El colectivo también exigió la salida del actual titular de la Fiscalía General de Justicia mexiquense, al que acusan de permitir prácticas de corrupción y mantener la impunidad en cientos de casos. Además, demandaron que el presidente del Tribunal Superior de Justicia, Héctor Macedo García, abra un diálogo sobre el problema estructural de las detenciones arbitrarias en la entidad.
Vecinos que observaron la movilización expresaron indignación por la falta de resultados. “Da miedo pensar que cualquiera puede ser detenido sin pruebas y terminar años en la cárcel. Eso no es justicia, es un abuso”, señaló Teresa Roldán, habitante de Toluca.
La marcha concluyó frente a Palacio del poder Judicial, donde las familias reiteraron que no se cansarán hasta ver en libertad a quienes fueron encarcelados sin pruebas.
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