Visitas
* Destaca Sheinbaum el reconocimiento que tiene la Semar
* Presionan reporteros para vincular a marino con corrupción
* Ignoran los medios las cifras de baja histórica de homicidios
Por Juan R. Hernández
Grupo Cantón
Ciudad de México.- Desde el inicio, la “Mañanera del Pueblo” parecía tomar un cauce ordenado: Esteva Medina anunció el arranque del tramo Saltillo–Nuevo Laredo del tren del norte y Samuel García, fiel a su estilo, agradeció el respaldo de la presidenta Claudia Sheinbaum, asegurando que la obra detonará empleos y movilidad en Nuevo León. A distancia, Andrés Lajous detallaba cifras de velocidad de los trenes, pero pronto esas notas ferroviarias quedaron relegadas a un segundo plano.
Cuando tocó el turno al informe de seguridad, desfilaron datos alentadores: reducción del 32% en homicidios dolosos, bajas en robo de vehículo y 296 ferias de paz. Marcela Figueroa, Rosa Icela Rodríguez y Omar García García Harfuch pintaron un panorama de logros y operativos, con decomisos de armas y detenciones por robo de hidrocarburos. Pero apenas concluyó la exposición, el salón cambió de tono.
@olivanoticias MañaneraDelPueblo Marino que se quitó la vida no estaba involucrado en ‘huachicol fiscal’: FGR OlivaNoticias Multimedios
Los reporteros, a gritos, exigían la palabra, algunos levantando la voz más alto que otros, conscientes de que no todos los de la primera fila serían elegidos. La insistencia se centró en un solo tema: el marino que presuntamente se suicidó. De pregunta en pregunta, buscaban forzar el vínculo con el huachicoleo, sugiriendo incluso que podría tratarse de un asesinato. Preguntas recicladas, enredadas, vueltas a plantear con distintas palabras, pero con el mismo trasfondo.
La presidenta Sheinbaum respondió con firmeza: “La Marina es una institución muy reconocida”, expresó al dar el pésame, cerrando de tajo la insinuación de complots. El Fiscal Alejandro Gertz fue aún más directo: “Este marino no tiene que ver con el robo de hidrocarburos fiscal”. Y García Harfuch desmintió versiones, cuidando cada frase para evitar darle vuelo a rumores.
Mientras la batería de cuestionamientos buscaba encajonar a las autoridades en la narrativa del huachicol, las respuestas fueron hábiles, sin rodeos. El informe de seguridad, con todo y cifras contundentes, quedó en segundo plano.
En medio de la tensión, Sheinbaum retomó la agenda con temas fiscales, Ayotzinapa y hasta su postura sobre Perú. Pero el eco que dominó la sala fue otro: la obstinación por ligar el caso del marino a la corrupción del huachicol, un intento que, pese a la presión y los gritos, se estrelló contra respuestas firmes y medidas.
Te puede interesar
