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Campesinos de Chimalhuacán intensificarán sus protestas con bloqueos en el CEM y la Peñón–Texcoco exigen que se han reconocidos como pueblos originarios
REDACCIÓN
GRUPO CANTÓN
El conflicto agrario en torno al Lago de Texcoco, volvió a detonar en la zona oriente del Estado de México, este martes ejidatarios de Chimalhuacán, denunciaron que el gobierno avanza consolidar el Parque Ecológico sobre terrenos que pertenecen a sus comunidades, arrebatándoles con ello un derecho que califican de histórico y ancestral.
Las inconformidades se transformarán en bloqueos carreteros que paralizaran, advierten, el Circuito Exterior Mexiquense y la autopista Peñón–Texcoco. Con estas medidas, los manifestantes buscan visibilizar un problema que, aseguran, ha sido ignorado durante años por los tres niveles de gobierno. Estas protestas a desarrollarse este miércoles.

Andrés Cedillo Castillo, representante del Comité de Tenencia de la Tierra de los Tlateles El Moño, explicó que la comunidad ha entregado múltiples oficios y solicitudes a las autoridades sin obtener respuesta alguna.
“Hemos agotado todos los caminos legales y nadie nos escucha. Nuestros derechos están en el olvido, aunque la historia respalde nuestra propiedad desde hace casi cien años”, expresó.
La exigencia central es que Chimalhuacán sea reconocido como pueblo originario, lo que permitiría garantizar el respeto a la propiedad ejidal dentro de la zona donde se desarrolla el megaproyecto ecológico. Esta demanda se suma a las de campesinos de Texcoco y Atenco, quienes también han manifestado inconformidad por el manejo de tierras en la región.

De acuerdo con el INEGI, más del 60% de los habitantes del oriente mexiquense dependen directamente del campo para sobrevivir. Para los ejidatarios, la exclusión de sus derechos no solo significa perder tierras, sino poner en riesgo el sustento de miles de familias que dependen de la agricultura.
Entre la preocupación vecinal, doña Carmen, madre de familia, compartió: “Es doloroso ver que construyen un parque bonito mientras a nosotros nos borran del mapa. ¿Qué futuro tendrán mis hijos si nos dejan sin tierra que heredarles?”.
Los ejidatarios reiteraron que las manifestaciones continuarán de manera indefinida mientras prevalezca la indiferencia gubernamental. “No buscamos confrontación, buscamos restitución”, enfatizó Cedillo.
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