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Por Juan R. Hernández
La Ciudad de México enfrenta desafíos históricos en materia de desarrollo urbano, derechos humanos y participación ciudadana. Frente a ello, la presidenta de la Comisión de Planeación del Desarrollo, Olivia Garza, presentó una iniciativa de Ley de Ordenamiento Territorial que busca sentar las bases del crecimiento de la capital por los próximos 20 años. Esta propuesta no solo contempla la regulación del uso de suelo, reservas territoriales y asentamientos, sino que incorpora principios de inclusión, equidad y sostenibilidad ambiental, asegurando que los servicios, la vivienda y los espacios públicos lleguen de manera justa a las 16 alcaldías. Además, la iniciativa establece instrumentos claros de participación ciudadana y mecanismos para evitar la especulación inmobiliaria, regularizar predios ejidales y ordenar asentamientos irregulares, con un enfoque técnico y de mejora urbana.
Este esfuerzo legislativo se suma a iniciativas del Congreso local para acercar la gestión a la ciudadanía. La Diputada Claudia Montes de Oca encabezó el relanzamiento de la revista institucional Tu Congreso, La Voz Legislativa de la Ciudad de México, un proyecto que busca consolidar un órgano informativo innovador, plural y accesible, reflejando el trabajo de todos los legisladores sin distinción partidista. La comunicación efectiva con la sociedad es un paso indispensable para garantizar transparencia y rendición de cuentas, y esta publicación es un ejemplo concreto de ese compromiso.
En paralelo, la Comisión de Derechos Humanos del Congreso local dio un paso significativo al aprobar el dictamen que propone a las 11 personas con mayor idoneidad para integrar el Consejo Ciudadano Honorífico de Derechos Humanos. Este proceso, respaldado por entrevistas y evaluaciones rigurosas, fortalece la voz ciudadana en la defensa de los derechos fundamentales y consolida al Congreso como un espacio de diálogo democrático.
La conjunción de estas acciones refleja un enfoque integral: planear el crecimiento urbano de manera equitativa, garantizar la transparencia legislativa y fortalecer los mecanismos de participación ciudadana. Más allá de iniciativas aisladas, se trata de construir un Congreso que conecte con la sociedad, impulse la equidad territorial y promueva la protección de los derechos humanos en la capital del país.
