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* Cultivos contaminados por décadas, ahora regulados
* Moléculas fueron vetadas por daños a la salud y medio ambiente
* Impulsa el decreto un modelo agrícola sustentable
Por Juan R. Hernández
Grupo Cantón
Ciudad de México.- México dio un paso decisivo hacia una agricultura más segura al prohibir el uso, importación y comercialización de 35 Plaguicidas Altamente Peligrosos (PAP), empleados durante décadas en cultivos como maíz, café, caña de azúcar, algodón, cítricos, tomate, chile, papa y arroz.
El decreto, publicado en el Diario Oficial de la Federación, fue impulsado por la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) en coordinación con Semarnat, Cofepris y la Secretaría de Economía, tras estudios que demostraron los efectos tóxicos de estas sustancias: cáncer, daño neurológico, alteraciones genéticas y contaminación persistente de suelos y cuerpos de agua.
La lista elaborada bajo criterios de la FAO, la OMS y PAN Internacional incluye: Aldicarb, Carbofurán, Endosulfán, DDT, Paratión, Metamidofós, Monocrotofos, Metil paratión, Dicofol, Heptacloro, Lindano, Clordano, Toxafeno, Pentaclorofenol, Atrazina, Triclorfón, Fipronil, Clorpirifós, Diazinón, Malatión, Oxamil, Terbufós, Profenofós, Dimetoato, Metiocarb, Pirimifós-metilo, Triazofós, Etoprofós, Azinfos-metilo, Quinalfos, Metidatión, Fenamifós, Disulfotón, Forato y Metomilo.
@jonathanlozada888 MÉXICO DECLARA LA GUERRA A LOS PLAGUICIDAS LETALES Y LOS PROHIBE. SE ACABÓ LO DAÑINO. Más información: https://jonathanlozadaenlared.com/
Todos estos compuestos han sido señalados en convenios internacionales como los de Basilea, Rotterdam y Estocolmo debido a su toxicidad aguda y crónica, persistencia ambiental y capacidad de bioacumulación. Muchos de ellos fueron prohibidos desde hace años en la Unión Europea, Canadá, Japón y Estados Unidos, pero en México continuaban siendo utilizados ampliamente, exponiendo a jornaleros agrícolas, comunidades rurales y consumidores a riesgos severos.
El decreto establece una transición regulada hasta 2030, con fases de sustitución y controles sanitarios que permitan a los productores migrar hacia alternativas más seguras y sostenibles.
De acuerdo con la SADER, en 2026 se publicará una segunda lista de plaguicidas a eliminar y en 2027 una tercera fase, con el objetivo de consolidar una agricultura libre de sustancias prohibidas a nivel internacional.
“Hay productos que no pueden usarse como si fueran aspirinas”, advirtió el secretario Julio Berdegué al presentar la medida durante la conferencia mañanera de la presidenta Claudia Sheinbaum, subrayando la urgencia de alinear la política agroalimentaria nacional con estándares globales más estrictos.
La prohibición representa un parteaguas en la historia del campo mexicano, al cerrar la puerta a compuestos que, si bien fueron eficaces contra plagas, dejaron tras de sí una herencia tóxica en tierras de cultivo, ríos y en la salud de miles de familias.
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