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Una narcomanta en la colonia El Seminario volvió a evidenciar la presencia de la delincuencia organizada, en tanto el presidente Moreno responde con bromas
REDACCIÓN
GRUPO CANTÓN
La aparición de una narcomanta en pleno corazón de Toluca, volvió a encender las alertas entre los habitantes de la capital mexiquense, pero no así en el ánimo del presidente municipal Ricardo Moreno Bastida.
El edil, lejos de reconocer el mensaje como una muestra del grave contexto de inseguridad que atraviesa la ciudad, lo minimizó e incluso intentó bromear, asegurando que quizá “se equivocaron de domicilio” y comparando la intimidación con un paquete mal entregado de Amazon.
El hecho no es menor. La lona, con mensajes firmados presuntamente por La Familia Michoacana, fue localizada la madrugada del jueves en un puente peatonal de la avenida Las Torres, en la colonia El Seminario, una de las zonas más conflictivas de Toluca.
@reportecapital Ante los mensajes intimidatorios que aparecieron en un puente de la Colonia el Seminario en Toluca, el alcalde señaló que no hay que hacer caso de estos y que la ciudad “es de paz”. También, destacó las detenciones que se han hecho de integrantes de estas células y que “Toluca no se vende”
En ella se advertía una “limpia” contra grupos rivales, dejando al descubierto la presencia de organizaciones delictivas en territorio toluqueño.
Los vecinos expresaron consternación y enojo ante la respuesta del alcalde. Para muchos, sus declaraciones son una burla frente a la realidad que enfrentan día a día.
“Uno ya no sabe si reírse o llorar. Nosotros vivimos con miedo, y el presidente dice que aquí no pasa nada, eso es no tener respeto por la gente”, afirmó un comerciante.
Moreno Bastida insiste en que los resultados “hablan por sí mismos”, recordando operativos donde se detuvo a miembros de bandas locales y a presuntos integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación.
También presumió que, durante su administración, la policía municipal no ha disparado un solo tiro.
Aunque las mantas fueron retiradas rápidamente por elementos de seguridad, el mensaje quedó flotando en el ambiente: el crimen organizado mantiene presencia y capacidad de acción en Toluca, mientras el gobierno municipal parece más interesado en maquillar cifras que en enfrentar de frente la violencia que golpea a la ciudadanía.
Para los ciudadanos la realidad es distinta: robos, extorsiones y homicidios mantienen una sombra constante en la capital mexiquense.
La preocupación se extiende entre las familias que sienten que la promesa de “recuperar la seguridad de Toluca” ha quedado en el olvido.
“No queremos discursos, queremos resultados. Que venga a caminar aquí en la noche a ver si se siente seguro”, reprochó una vecina de El Seminario.
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