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REDACCIÓN
GRUPO CANTÓN
La corrupción en Nezahualcóyotl dejó de ser un rumor y se volvió evidencia. Un funcionario de Protección Civil fue detenido justo en el momento en que contaba $28,000 en efectivo, presuntamente entregados por gaseros a quienes extorsionaba para evitar sanciones.
El hecho ocurrió dentro de las oficinas públicas de la dependencia, ubicadas en la colonia Benito Juárez, y desató la indignación de una ciudadanía cansada de los abusos disfrazados de operativos.
El sujeto, quien formaba parte de la Comisaría General de Seguridad Ciudadana, exigía pagos bajo amenaza de clausura de unidades de gas. “Nos dijo que, si no le dábamos el dinero, sellaría la pipa y nos metería en un problema legal”, relató uno de los afectados, con evidente temor a represalias.
Fue gracias a una denuncia anónima que elementos municipales lograron sorprender al servidor público mientras contaba el dinero dentro de su oficina.
Lejos de tratarse de un caso aislado, vecinos de la zona afirman que este tipo de extorsiones son una práctica común.
“Todos lo sabemos. Aquí nadie revisa nada si das tu ‘aportación’, y si no, te hacen la vida imposible”, comenta María López, comerciante de la zona oriente. La detención del funcionario solo confirma lo que por años han venido denunciando: un sistema de corrupción normalizado y operado con la complacencia de mandos superiores.
El gobierno municipal ha emitido un escueto comunicado donde promete revisar las operaciones internas de Protección Civil y realizar auditorías. Pero en las calles, la desconfianza es mayor que la esperanza.
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