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Por Salvador Guerrero Chiprés
@guerrerochipres
UNA AUTÉNTICA VOCACIÓN
Cuando una administración responde de forma directa, rápida y eficaz, demuestra no solo voluntad política, sino también una auténtica vocación de servicio libre de burocratismo.
Una cámara de seguridad obstruida, un botón de auxilio inservible o la ausencia misma de esas herramientas en zonas donde la comunidad las necesita, son síntomas de una gestión que ha perdido el pulso territorial.
En contraste, la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México ha impulsado modelos de atención basados en la cercanía y la inmediatez, especialmente en temas de seguridad. Se trata de un quiebre con las inercias del aparato público, que muchas veces diluyen las soluciones tras montañas de trámites y oficios.
Ejercicios de gobierno abierto como Zócalo Ciudadano o Casa por Casa han permitido al C5 identificar, junto con los vecinos, la necesidad de nuevas herramientas en puntos reconocidos por su conflictividad. También se han detectado dispositivos existentes —cámaras y botones de auxilio— que requieren mantenimiento inmediato.
A la fecha se han recibido más de 800 peticiones ciudadanas, principalmente relacionadas con el funcionamiento o instalación de cámaras. Este modelo de atención directa permite analizar de inmediato la viabilidad operativa y tecnológica para la colocación de nuevos equipos —como actualmente ocurre, por ejemplo, en Topilejo, Tlalpan—, así como para la reparación de los ya existentes.
Un gobierno que escucha fortalece la transformación. Esa máxima cobra especial sentido cada 18 de julio, cuando se conmemora el Día Mundial de la Escucha, una fecha originalmente impulsada desde las artes sonoras, pero que posee profundas implicaciones políticas. Escuchar no es solo una acción sensorial: es voluntad de construir seguridad desde el vínculo directo con la comunidad.
La administración dinámica actúa sin el peso muerto de la burocracia.