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Lengua larga
El Centro de Transferencia Canina esta por vivir una de sus peores etapas; y es que a su titularidad llegó una pseudo morenista, de nombre Ana María Palma, que lo único que hizo bien fue hacerle la barba a otra chapulina, Ana Villagrán.
La mujer se ha caracterizado por ser problemática, estaba en el equipo de Morena en Benito Juárez y se dedicó a hablar mal de Leticia Varela, Eduardo del Mazo, Hugo Torres, Sofía Vélez, Pablo Hernández y hasta habló pestes de la representante de las mujeres, Citlali Hernández, de quien se permitió hablar de su peso y su cuerpo, a pesar de que la propia Ana carece de un cuerpo esbelto.
En fin, solo ella sabrá porque en pleno siglo XXI habla de cuerpos ajenos, cuando hay temas más relevantes de los que se puede hablar.
La mujer, que carece de cualquier tipo de preparación, llegó al cargo del CTC, por andar, dicen, de huele pedos de Villagrán; y es que la titular de Agatán, la hizo su amiga porque en Morena nadie la quiere porque primero hablaba pestes de ellos y luego resultó que abandonaba el PAN para buscar un hueso en el partido guinda.
Y para muestra, las dos se pintaron el cabello de cobrizo, en ofrecimiento al partido como una muestra de lealtad, que nadie les cree.
La joven, que carece de expertis en el área ambiental y animalista, dejó su carrera de paramédico a medias, para pasar a ser movilizadora en Morena luego de que su novio le consiguiera un lugarcito en el equipo de BJ.
La joven no desaprovechó nada y cuentan por ahí que estuvo involucrada sentimentalmente con un priista de Benito Juárez para ver qué más le sacaba.
Y bueno, después de darse cuenta que nada, optó por acompañar a Villagrán a todas las jornadas y hacerle creer a la gente que es animalista; aunque jamás se pronunció acerca del maltrato que su mejor amiga infringe a sus perros dentro de su hogar.
