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Huixquilucan enfrenta un acelerado proceso de gentrificación, con precios de vivienda que superan los 3 millones de pesos, inalcanzables para familias locales
POR DANIEL ESCOBAR
GRUPO CANTÓN
El senador Enrique Vargas culpó de la reciente violencia contra la gentrificación, al constante énfasis que hace la llamada “Cuarta Transformación” respecto a la fuerte diferencia de clases que hay en el país, sin embargo, Huixquilucan, municipio que gobernó entre 2026 y 2021 y ahora planea encabezar de nuevo, es donde su población corre considerablemente el riesgo de verse en la necesidad de desplazarse, por la especulación inmobiliaria que hay en la demarcación.
“La división social que durante los años recientes se ha señalado en el discurso político del partido en el gobierno, dividiendo abiertamente a nuestro país en ‘chairos’ y en ‘fifís’ (…) ahí está la manifestación que se realizó la semana pasada en la colonia Roma (en la Ciudad de México) en protesta contra la gentrificación, con consignas directas contra los extranjeros”, afirmó Vargas del Villar en una columna publicada el fin de semana pasado.
A la par de esta acusación, el municipio mexiquense de Huixquilucan fue recientemente rankeado por la compañía de bienes raíces Clau.com, como una de las que destaca en México, respecto a un acelerado encarecimiento de la renta y compra de vivienda, lo cual es atractivo para inversionistas, sin embargo, pone en riesgo a la población original de la demarcación a ser desplazada por personas de mayor poder adquisitivo, es decir, a ser víctimas del fenómeno conocido como “gentrificación”, término acuñado por la socióloga Ruth Glass.
“El ingreso promedio de una familia mexicana es de 14 mil 447 pesos mensuales, mientras que el precio mediano de venta en las principales zonas metropolitanas del país fue de 3 millones 167 mil 500 pesos en junio de 2024 (…) Huixquilucan, Estado de México y Álvaro Obregón, Ciudad de México. En estas entidades se podría recuperar más rápido la inversión al adquirir propiedades para ponerlas en renta”, afirma el estudio de Clau.com.
El propio Enrique Vargas adjudicó la actual situación inmobiliaria en Huixquilucan, a la política de desarrollo socioeconómico iniciada durante sus gobiernos, y ahora continuada por su esposa y hoy alcaldesa, Romina Contreras.
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