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Blanqueados, forrados y blindados

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Se van los ministros de la Corte luego de la elección judicial de la que tendremos resultados en poco más de una semana, sin embargo, llama la atención que se aprobara, en últimas un proyecto del ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá en el que se establecen garantías a los miembros de la Corte, en detalle una nota de La Jornada de ayer, 1 de junio y firmada por Gustavo Castillo, detalla las garantías especialmente reforzadas que aseguran la independencia de la SCJN y “la de sus integrantes, distintas a otros órganos jurisdiccionales, que eviten la interrupción o perturbación de la función judicial suprema mediante denuncias frívolas o malintencionadas en contra de ministros y ministras”

Detalla también la inmunidad frente a acusaciones políticas o penales; la propuesta aprobada alude a la inexistencia de un marco legislativo que desarrolle y precise el procedimiento sancionador aplicable a dichos juzgadores y declararon que el procedimiento para atender quejas y denuncias ciudadanas para las responsabilidades administrativas de miembros de la Corte, ya no estará vigente y aplica para ministros en funciones o en retiro.

Conscientes de que se van y muy a modo, aprovechando que el marco jurídico en el que actuará el Tribual de Disciplina Judicial está en proceso, ahora también la Corte se blinda contra actos pasados y presentes y no podrán ser juzgados por atropellos, irregularidades o sentencias a modo cometidas mediante un decreto que ellos mismos aprobaron y de entrada las llaman denuncias frívolas o malintencionadas (que aún no reciben) …¡vaya descaro!

Esa es la Corte que tendremos hasta el 1 de septiembre en el que los todavía togados se marchen, limpiecitos, con sus haberes de retiro, que en algunos casos haciende a más de 3 millones anuales, que bajará un 80% a partir del tercer año y será vitalicia, más, por supuesto, el servicio médico correspondiente.

Si bien, llevar a juicio a un ministro puede ser tan desgastante como hacerlo con un expresidente (casos Salinas, Zedillo, Fox, Calderón, y Peña), no deja de ser indignante que antes que irse, limpios y forrados, también lo hagan blindados, y esto no muestra más que la razón por la cual era necesario que, aún con todos los tropezones que ha tenido la nueva elección y que irán mejorando, quitáramos de raíz el foco de corrupción en la Corte. ¡Hasta nunca!

Ana María Vázquez

Escritora/Dramaturga

@Anamariavazquez

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