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Por Salvador Guerrero Chiprés
La ciberprevención es la estaca
Los vampiros modernos no necesitan castillos ni ataúdes. Se esconden en pantallas, se deslizan por redes de datos y chupan lo más valioso: identidad, dinero y confianza. Son los ciberdelincuentes del siglo XXI al acecho de quienes bajan la guardia frente a las ofertas.
En el calendario de las conmemoraciones insólitas, el 26 de mayo figura como el Día Mundial de Drácula, un homenaje cultural a la figura literaria del siglo XIX creada por Bram Stoker, que puede encontrar otros referentes en los depredadores del ciberespacio, con mayor presencia en temporadas de ofertas.
Según datos de la Asociación Mexicana de Venta Online, el comercio electrónico en México tiene un valor superior a los 650 mil millones de pesos. Temporadas de descuentos como el Hot Sale —a realizarse esta semana—, concentran millones de operaciones en las cuales es necesario fortalecer la ciberseguridad.
Los reportes por fraude digital aumentan entre un 30 y 40 por ciento durante los periodos de grandes promociones. Los vampiros del internet clonan páginas casi idénticas a las oficiales, compran espacios en redes sociales para promocionar estafas con estética profesional y automatizan ataques a través de bots que barren la red en busca de víctimas.
El inicio del Hot Sale y su coincidencia con el Día Mundial de Drácula permite una analogía inquietante: así como el vampiro clásico se aprovechaba del sueño de sus víctimas, el ciberdelincuente se nutre del letargo de los consumidores.
La lógica de seguridad preventiva, tecnológica y comunitaria impulsada en la Ciudad de México por la Jefa de Gobierno, Clara Brugada, es central en su aplicación individual en el ciberespacio, con acciones como dudar de las grandes ofertas o evitar sitios web a través de enlaces enviados por correos.
Frente al Drácula de ecommerce, la ciberprevención es la estaca.
