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Por Eduardo López Betancourt
El Magistrado, Carlos López Cruz, se ganó “a ley” el apodo de “El Caco”, ya que, le regresó cuantiosos bienes a Raúl Salinas de Gortari, quien fue procesado y considerado, sin ninguna duda, responsable del delito de “Enriquecimiento Ilícito”. El Magistrado de “marras” inventó, en compañía de otro de sus congéneres, que el hermano del Presidente “turbio”, era inocente.
Nada más falso que ello, pero bien se asegura que “El Caco” se llevó una buena cantidad de dinero que cínicamente disfruta sin prudencia.
El impresentable Magistrado, llegó al nivel más alto después del ministerio, debido a su audacia y por aprovecharse de la buena fe de respetables Ministros, a quienes trató siempre con “lisonjas” al por mayor, como es costumbre en el Poder Judicial Federal, donde sabemos, hay pillos como López Cruz, pero también existe gente decente, como el Dr. Ricardo Ojeda Bohórquez, destacado académico que enaltece el ámbito judicial. Aceptemos que gran parte de Magistrados y Jueces no solo son capaces, sino son producto de una tozuda y responsable Carrera Judicial. No es el caso de Car-los, quien sin más historia que la de ser escribano, obtuvo una magistratura, la cual ha manchado impunemente.
El caso de Salinas no es el único, es cotidiano y bien conocido su actuar, de que cada expediente que llega a su escritorio, por conducto de testaferros, procura acercarse a los promoventes o a sus abogados para pedir considerables sumas. Recientemente se confirmó su faceta, al quitarle a un defraudador de “grandes vuelos”, la elemental medida cautelar de mantenerse en el País, recogiéndole el pasaporte e ir a firmar ca-da 15 días. Al conceder López Cruz el Amparo, el presunto culpable huyó de México, no sin antes llenar las alforjas del insaciable “Caco”, toda una vergüenza y justificación para los cambios que se avecinan al Poder judicial.
Lo peor, es que, este cínico está promoviendo su candidatura para mantenerse nueve años más en el poder y asegura contar con el apoyo del partido Morena. Al igual que él, su hermano es otro indecente y ambos deambulan en el mundo electoral, a lado de respetables personajes. Esperamos que Morena tenga cuidado en cobijar a ejemplares de tan “baja estofa”.
