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El impacto económico de estos atracos es devastador para los propietarios de vehículos, las pérdidas pueden ascender a varios miles de pesos sin castigo
REDACCIÓN, GRUPO CANTÓN
Naucalpan se ha convertido en un territorio donde la delincuencia opera con total impunidad. La creciente ola de robos de autopartes ha sumido a los habitantes en la desesperación, pues ni la iluminación pública, ni las cámaras de vigilancia, ni la presencia de patrullas logran frenar esta actividad ilícita.
Las denuncias se han vuelto inútiles y, en muchos casos, las víctimas prefieren no presentarlas, sabiendo que la respuesta de las autoridades, es inexistente y que los delincuentes rara vez son capturados.
Vecinos de diversas colonias, como San Rafael Chamapa, han denunciado la constante sustracción de piezas de sus vehículos estacionados en la vía pública.
Este delito se ha vuelto tan común que los habitantes viven con el temor de que, en cualquier momento, su automóvil sea desvalijado.
La madrugada de ayer nuevamente fue captado el ro**bo de autopartes en la colonia Boulevares #Naucalpan lado oriente. pic.twitter.com/TC4mdxumGl
— Soy Naucalpan (@SoyNaucalpan) March 20, 2025
Los delincuentes, bien organizados y con total conocimiento del mercado negro, roban espejos, rines, tapones y computadoras automotrices, sabiendo que estos artículos pueden venderse con rapidez y sin dificultad.
Según reportes de la Unión de Colonias de Naucalpan, los robos se realizan en cuestión de minutos. Un video captado por vecinos y difundido en redes sociales muestra a un grupo de delincuentes operando con una precisión escalofriante. En menos de tres minutos, los sujetos logran despojar a un vehículo de sus autopartes, demostrando la efectividad de su modus operandi.
En las imágenes, se observa cómo una camioneta blanca se acerca sigilosamente a una calle repleta de vehículos, su conductor se estaciona detrás de una unidad, y de inmediato un hombre desciende para arrancar las piezas con total tranquilidad.
Sin prisa, como si se tratara de un trabajo rutinario, el ladrón concluye su labor y huye sin oposición alguna. Los testigos aseguran que estos robos ocurren a cualquier hora del día, incluso en plena luz del sol, lo que evidencia la ausencia de vigilancia y la impunidad con la que actúan los delincuentes.
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