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“Teuchitlán no es mi talón de Aquiles”: Sheinbaum

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  • Opositores han querido hacer campaña negra
  • Crimen organizado, cinco sexenios de evolución
  • Fragmentación de cárteles, incrementó violencia

JUAN R. HERNÁNDEZ

Ciudad de México.- La presidenta Claudia Sheinbaum, descartó que el hallazgo de un centro de adiestramiento y presunto campo de exterminio en Teuchitlán, Jalisco, vaya a convertirse en su “talón de Aquiles”.

Al ser cuestionada sobre cómo enfrentará las críticas contra su gobierno por el descubrimiento del Rancho Izaguirre y el manejo del caso, la mandataria aseguró que “no tiene mucho impacto”, pues ha sido la oposición quien ha querido aprovechar el tema para hacer campaña en su contra.

“Yo no considero que sea mi talón de Aquiles o talón de cualquier otro tipo. (…) Sin la información suficiente, ha venido una supuesta crítica al gobierno”, declaró.

NO ES EXCLUSIVO DE LA 4T

La evolución del crimen organizado en México ha sido una constante en los últimos 5 sexenios, marcada por la fragmentación de cárteles históricos, el aumento de fosas clandestinas y la aparición de campos de entrenamiento.

De acuerdo a varios análisis, este fenómeno no es exclusivo de la actual administración, sino que refleja un proceso de transformación de las organizaciones criminales.

CIMIENTOS DEL NARCO

Con Ernesto Zedillo, el narcotráfico comenzó a mutar con la fragmentación del Cártel de Guadalajara. El Cártel de Juárez se consolidó tras la muerte de Amado Carrillo Fuentes, mientras el de Sinaloa expandía su influencia, especialmente tras la fuga de Joaquín “El Chapo” Guzmán en 2001. El Cártel del Golfo fortaleció su estructura bajo Osiel Cárdenas y nacieron Los Zetas, formados por exmilitares.

EL AUGE DE LOS ZETAS

Con Vicente Fox, Los Zetas se consolidaron como una organización independiente, mientras surgían nuevos grupos como La Familia Michoacana y los Beltrán Leyva. Las fosas clandestinas se volvieron un método más recurrente desaparecer víctimas.

LA GUERRA DE FECAL

Con Felipe Calderón, la violencia escaló exponencialmente. Se registraron más de 5 mil fosas clandestinas y se establecieron campos de exterminio, como en Coahuila, donde se encontraron miles de restos óseos calcinados. Además, surgieron más de 80 grupos del crimen organizado, incluyendo el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).

PERSISTE VIOLENCIA

El gobierno de Peña Nieto intentó cambiar la narrativa sobre la seguridad, pero la violencia continuó. En estados como Veracruz y Jalisco se consolidaron campos de exterminio, con hallazgos masivos como los más de 300 cuerpos en Colinas de Santa Fe, Veracruz.

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