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Susana Cueto anda que no la calienta ni el sol, igual y puede ir a la playa porque ahí si calienta y mucho “Cuando calienta el sol, aquí en la playa, siento tu cuerpo vibrar” pero de enojo.
Dicen los que andan en el Congreso de la CDMX que la mujer está muy enojada que cuando habla de su despido hasta tiembla del coraje.
Aseguran los que andan por ahí que Cueto está buscando por todos lados a los de la bancada de Grupo Parlamentario del PAN para que la ayuden; tanto así que se dice por ahí que Ricardo Rubio y Juan Sebastián Burelo ya andan prestándole su hombro para que la mujer llore.
Ahora, después de la controversia y el Zafarrancho que tuvo Rubio con Martha Ávila hace unos ayer, queda la incógnita de saber porque el panista quiere ayudar a la protegida de la morenista.
Bueno, aunque ni tan protegida porque Martha no metió ni las manos por Susana. ¿Pero es que a quién se le ocurre ponerse hablar pestes de la coordinadora de la banca morenista?
Es bien sabido que Xóchitl Bravo es intachable y es deleznable lo que Susana quiso hacer al desprestigiar su trabajo.
Y bueno, también andan cuchicheando que Juan Burelo podría llevarse a Cueto a comunicación del PAN en el Recinto de Donceles; aunque se espera que el hombre solo sea apoyo moral y no vaya contra las normas de los establecido.
Los ciclos terminan y queda claro que el de Susana en el Congreso ya terminó; ahora dice que se le chispoteó uno que otro comentario en contra de Bravo, que eran broma y no eran para tanto.
