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Por Salvador Guerrero Chiprés
@guerrerochipres
¿Había sido vista esa persona persistente en la esquina? ¿Mira insistentemente hacia un conjunto de viviendas y realiza anotaciones en celular o libreta? ¿Pasa mucho tiempo parada en la calle o dentro de un vehículo?
No se trata de ser súper héroes ni enfrentar a nadie. Sí podemos contribuir con reportes anónimos a fortalecer la comunidad y prevenir e inhibir el delito, particularmente el robo a casa habitación en temporada vacacional.
La ausencia prolongada de los habitantes y la disminución de la vigilancia vecinal aumentan las oportunidades para los delincuentes. El reporte de actividades sospechosas a la línea de emergencia 911 y el uso estratégico de herramientas tecnológicas, como sistemas de videovigilancia, son claves para prevenir los delitos. Lo determinante es presencia permanente, el único inhibidor categórico. Aun así, existen ocasiones, aunque sea minoritarias, de una amenaza criminal sistemática donde incluso la presencia, salvo disuasiva por número y policial, es insuficiente.
Activemos, mientras esa amenaza indeseable eventualmente se presenta, una cadena de respuestas institucionales, como el monitoreo de cámaras de seguridad pública desde el Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano (C5) de la Ciudad de México y las líneas 911 y 089 para la denuncia anónima y la app Mi Policía, por ejemplo.
En diciembre del 2023, el C5 atendió mil 184 reportes por robo a casa, concentrados principalmente en Iztapalapa, Gustavo A. Madero, Tlalpan y Coyoacán, entre las 23:00 y las 2:00 horas. Aunque este delito ha tenido una disminución de 51.8 por ciento entre 2019 y 2024, fortalecer la cultura de la prevención ayudará a profundizar los resultados de la política de seguridad instruida por la Jefa de Gobierno, Clara Brugada.
Reportar actividades sospechosas es una acción poderosa.
