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Familias reprueban administración en Coacalco.
En los últimos meses la ola de violencia ha aumentado, mientras que Sánchez Isidoro, es señalado por graves irregularidades fiscales en el uso de recursos del ayuntamiento
HÉCTOR QUEZADA
GRUPO CANTÓN
En Coacalco, pese a que el edil reelecto, David Sánchez Isidoro, ha sido acusado por actos de corrupción y señalado por la falta de estrategias de seguridad, ante el aumento en la incidencia delictiva, el priísta afirmó que su gobierno es transparente, no obstante, la mayoría de la población, ha reprobado el actuar del priísta.
Según el Ranking Mitofsky, 6 de cada 10 habitantes ha reprobado la administración actual, lo que lo posicionó en el lugar 137 de entre los 150 ediles evaluados a nivel nacional, esto en gran medida, al aumento en el número de homicidios, asaltos y denuncias por narcomenudeo.
Organizaciones vecinales realizaron movilizaciones y bloqueos, derivado del incremento en el número de balaceras y ejecuciones, donde participaron grupos de motociclistas, no obstante, esta situación no ha cambiado la percepción de inseguridad en la demarcación.
Te invito a conocer los resultados que hemos logrado juntos por Coacalco.
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— David Sánchez (@davidsanchezi) November 28, 2024
Tras estos hechos, los colonos denunciaron el aumento de la violencia, tan solo en octubre, se registró un incremento en cuanto al total de delitos, en comparación con el mismo mes del año pasado, donde se registraron tres homicidios, así como 158 asaltos con violencia, por 77 robos de negocios y más de 70 robos de vehículos, lo que posicionó al municipio como uno de los más peligrosos en el estado.
Pese a que Sánchez Isidoro ha señalado, la transparencia como una característica de su gobierno, en días recientes, el Órgano Superior de Fiscalización mexiquense (OSFEM), detectó irregularidades financieras en el municipio, por el ejercicio fiscal del año pasado, donde no se informó sobre el destino de 95.7 mdp.
Entre las acusaciones, se encuentran la falta de comprobación en la entrega de obras, así como trabajos no ejecutados, el incumplimiento al objeto del gasto y la adjudicación indebida a diversos proveedores y constructores.