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LENGUA LARGA
Fíjese usted, querido lector, esta columnista estaba escuchando la cumbia tartamuda de Tufic cuando se le vino Juan Pablo Beltrán Viggiano a la cabeza.
Ahora verá, Juan Pi, ha tenido pases directos a esta columna y no es para menos pues el joven además de ser hijo de la senadora Carolina Viggiano no tiene más mérito que nacer en cuna priísta.
Juan Pi es el presidente de la Comisión de Gobierno de la alcaldía Miguel Hidalgo, el puesto se lo dieron porque Rodrigo Villanueva y Mauricio Tabe sabían que les sería fácil manipular al joven para que no molestara al manotas, César Garrido, y este pudiera seguir con sus trinques.
Pero ahí le va, el problema es que el joven ni manipulable, ni nada. Durante la sesión de ayer a la alcaldía acudió, Gustavo García, abogado morenista que se ha encargado de evidenciar la mafia que hay en la MH.
García pidió su voz como ciudadano, y pues como “más sabe el diablo por viejo que por diablo”, el abogado apabulló a JuanPi; quien canceló la sesión al no haber condiciones para llevarla a cabo y lo hizo entre tartamudeos y nerviosismo.
Juan Pablo, repite con esta escribana “se dice ju-rí-di-co”; después de este ejercicio esta chismosa le explicará a usted, querido lector, que el joven de 22 años ni pudo leer la palabra jurídico, porque ni eso puede hacer bien.
Así es, a pesar de que el priísta lleva su guión con puntos y comas para saber qué decir, parece que los talleres del PRI de hablar en público no los tomó Viggiano.
Y bueno, ni a García lo dejaron hablar, ni a Viggiano le salió bien eso de defender la comisión que le regalaron por 3 años.
Ni la expresidenta panista, Mayeli Ruiz, hizo un papel tan denigrante como el que el joven Juan Pablo está haciendo en esta comisión.
Lo que sí es que, Mayeli, esos zapatitos que usas, ¡nada que ver!
JuanPi, los pañuelos desechables salen baratos, se te avisa por aquello de que saliendo de sesión te da por llorar.