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NICOLÁS ROMERO, EDOMEX.
En el municipio de Nicolás Romero, la alcaldesa electa se olvidó de los problemas sociales al momento de realizar las propuestas para su gestión en la demarcación
HÉCTOR QUEZADA
GRUPO CANTÓN
En Nicolás Romero, la alcaldesa electa, Nanyeli Mendoza, ha vivido del erario público, pues desde 2003 ha participado en diversas áreas del ayuntamiento, sin embargo, ninguna de estas estuvo relacionada con la administración pública, pues se desempeñó en tareas relacionadas con el DIF local y la administración tributaria.
De acuerdo con la plataforma Conóceles, la alcaldesa electa ha laborado en el ayuntamiento como Supervisora de Cobranza, así como síndica municipal durante la actual administración e inclusive como Directora del Bienestar municipal y Procuradora Municipal de menores de edad en el DIF local.
Además, en su primera experiencia dentro de un cargo de elección popular, la morenista propuso que se garantizará un vivir mejor de los pobladores menores de edad y se priorizará una educación para el cuidado del agua, sin embargo, se olvidó por completo de algunos de los verdaderos problemas del municipio, como lo es la delincuencia, falta de agua y la nula inversión pública en la actual administración, de la cual, formó parte hasta marzo de este año.
Desde Nicolás Romero hemos impulsado diversas acciones en favor del bienestar, cuidado y garantía de los derechos de las infancias de nuestro Municipio👇🧵
(1/5) pic.twitter.com/rrXf1kqF0L— Yoselin Mendoza (@yosemendozanr) October 11, 2024
Uno de los problemas principales es el agua, pues en el municipio se han denunciado cobros excesivos por parte del organismo municipal, así como el abuso por parte de los choferes de pipas, quienes aprovecharon la sequía para lucrar con el servicio.
Del mismo modo, la edil electa fue omisa ante el repunte en la incidencia delictiva, pues durante este año, se ha registrado un aumento en el número de homicidios, extorsiones, robos de vehículos y asaltos, los cuales, pese a ser denunciados por los habitantes, la estrategia de seguridad implementada ha sido nula.
De igual manera, pese a que Nicolás Romero es un municipio “dormitorio”, esto derivado de que el 90% de sus habitantes se trasladan diariamente a la CDMX o demarcaciones cercana para trabajar, la edil falló en las propuestas para incentivar y desarrollar la economía local, por lo que los pobladores deberán viajar a sus empleos.