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En su dirigencia el tricolor pasó de tener 12 gubernaturas a dos y de alcanzar 70 diputaciones a nueve en las pasadas elecciones
OMAR MONTALVO
Ciudad de México.– Los años de domino del PRI en el mapa político quedaron en el pasado desde 2019 que Alejandro “Alito” Moreno tomó posesión como dirigente nacional del tricolor, un periodo en el que sólo ha mantenido dos gubernaturas, y donde su representación legislativa en la Cámara de Diputados pasó de 70 a nueve en las pasadas elecciones. Pese a los nulos resultados el priísta promovió una serie de cambios en los estatutos para extender su reelección como presidente del partido.
Cuando Moreno Cárdenas asumió la dirigencia del partido, el PRI tenía el control de 12 gubernaturas: Sonora, Sinaloa, Coahuila, Zacatecas, San Luis Potosí, Colima, Hidalgo, Estado de México, Tlaxcala, Guerrero, Oaxaca y Campeche.
Además, el ascenso de Alito como presidente nacional del tricolor también estuvo marcado por inconformidades con personajes como Ivonne Ortega, exgobernadora de Yucatán que también buscó sin éxito la dirigencia. Tras perder la elección interna, Ortega y otros priístas como José Narro, exrector de la UNAM, renunciaron al partido.
De forma rápida, en las elecciones intermedias de 2021 el tricolor liderado por Alito Moreno perdió el dominio de siete entidades y se quedó únicamente con Coahuila, Hidalgo, Oaxaca y Estado de México. Pronto en las elecciones de 2022 el PRI perdió ante Morena la gubernatura de Oaxaca y en 2023 el Estado de México, considerado uno de los bastiones del tricolor de donde surgieron liderazgos y expresidentes del partido.
Para 2024, el PRI se quedó únicamente con Coahuila y Durango que recuperó en 2022 al contender en coalición con los partidos PAN y PRD.
En el poder legislativo el PRI llegó a las elecciones de 2018 con 45 diputados que en 2021 aumentó a 70, pero al 2024 la representación en la Cámara Baja fue reducida a nueve diputados del tricolor. Mientras que en la Cámara de Senadores su representación se mantiene baja, ya que en 2018 tenía 13 senadores y para la próxima legislatura tendrá 12.
En el transcurso del periodo de Alito al frente del tricolor, el partido también ha perdido hasta el 80.3 por ciento de su militancia. De acuerdo con el Instituto Nacional Electoral (INE) en 2019 el PRI contaba con 6 millones 764 mil afiliados a 1 millón 411 mil 889 militantes en 2023, que a su vez representa la mayor caída de popularidad en un partido político a nivel nacional. Esta caída del tricolor también se debe a los desacuerdos de liderazgos al considerar como un error la alianza del PRI con partidos como el PAN, que antes eran opositores.
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