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Por Salvador Guerrero Chiprés
La denuncia de los delitos más complejos y peligrosos, así como la detención de los responsables son clave para el crecimiento de la percepción de seguridad y, por supuesto, para la disminución de la incidencia delictiva.
Nada de eso puede ocurrir sin la voluntad política de quienes dirigen el gobierno y también de quienes tienen en sus manos denunciar la comisión de los delitos desplegados frente a sus ojos, esto es, desde la ciudadanía.
Ambas cosas han ocurrido frente al complicado tema de la Trata de Personas. Este miércoles, un Cuarto Reporte sobre la acción y auxilio disponibles frente al fenómeno tan complejo como global de la esclavitud moderna será presentado en el Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México con la presencia del titular de la Fiscalía General de Justicia, Ulises Lara.
En tres ocasiones al menos, la Presidenta electa, Claudia Sheinbaum, encomió generosamente la labor desplegada a partir de la gestión de la Línea y Chat Nacional Contra la Trata de Personas a cargo del Consejo. El robustecimiento de esa tarea está directamente relacionado con la decisión de la próxima primera mandataria para visibilizar los delitos y combatirlos, y la continuidad de la misma tarea por parte del Jefe de Gobierno, Martí Batres. Este último develó ayer un busto en la memoria de Porfirio Muñoz Ledo, otra voz destacada contra el delito global cuando fue embajador de México ante la Unión Europea.
Antes de Lara, también acompañaron informes sobre el tema Ernestina Godoy, próximamente Consejera Jurídica de la Presidencia, y representantes del área de combate al crimen organizado de la ONU, como Kristian Hölgue. El respaldo desde esa oficina de Natalia Espinosa en esta lucha ha sido también significativo. Presenté el modelo de atención de la CDMX en la sede de la ONU en Viena el pasado 10 de julio. Hoy comunicamos resultados adicionales.
Denunciemos la Trata de Personas.
