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septiembre 07, 2024

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Carlos Sansores: el gigante del tatami

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El triple medallista mundial de 26 años y 1.94 de estatura, acudirá a sus segundos juegos olímpicos: “quiero esa medalla y voy a trabajar por ella”

CARLOS HORTA MARTÍNEZ
GRUPO CANTÓN

Carlos Sansores, el originario de Cancún, Quintana Roo, es uno de los exponentes más importantes que tiene México en el Taekwondo. Sin embargo, su camino no ha sido nada sencillo, durante sus primeros años se tuvo que sobreponer a los problemas económicos en casa y al bullying escolar.

En sus primeros años en Chetumal, el dinero escaseaba en casa. Sus padres tenían que trabajar hasta de noche con tal de darle todo a su pequeño hijo, así que en ocasiones le tocaba quedarse solo en las noches. Algo que lo asustaba, sobre todo porque su casa, que era bastante humilde, tenía una puerta de lámina, que estaba ubicada a lado de un panteón y peor aún, cerca de una barranca.

La situación económica de la familia mejoró un año más tarde, así Carlos pudo disfrutar de tener más comida en casa y alguno que otro antojo que podían darle. Él mismo notó que había subido un poco de peso, por lo que sus compañeros se burlaban de él, diciéndole “gordo”, a tal grado de golpearlo sin motivo alguno. Todo terminó en pelea y fue entonces que Sansores decidió meterse a clases de taekwondo.

Desde los 11 años practica este deporte gracias a que le dieron la oportunidad de entrenar gratis en una escuela de Chetumal, donde vivió gran parte de su infancia; actualmente cuenta con su clasificación a París 2024, que serán sus segundos Juegos Olímpicos.

Daban clases gratuitas a los hijos de policías, y yo sin serlo, me dieron el chance de practicar la disciplina, me dieron las bases y luego de que pude dar mi primera medalla nacional, me regresé a Cancún con mi coach estatal, Sinhue Peniche; él estuvo más de siete años con la selección nacional, entonces tiene experiencia”, compartió al diario Basta, a cuatro días del inicio de los Juegos Olímpicos de París.

Una vez que conoció el taekwondo, no paró hasta llegar a entrenar con la selección, en el Centro Nacional de Desarrollo de Talentos Deportivos y Alto Rendimiento (CNAR), complejo perteneciente a la CONADE.

Llegué a los 16 años a Ciudad de México, como invitado; me dieron la oportunidad, al ver esa proyección en mí, la cual aproveché. Cuando llegué a selección nacional no se sabían ni nombre, entonces me pusieron Cancún, como la ciudad, me decían: Cancún ven para acá”, rememoró el tres veces medallista mundial: plata en Manchester 2019, oro en Guadalajara 2022 y plata en Bakú 2023.

Siempre quise salir adelante, ayudar a mis papás; sabía que entre más tiempo me quedara en el CNAR, sería más ayuda para ellos”, recordó con una sonrisa en el rostro.

La primera medalla internacional para el joven taekwondoín se dio bajo las instrucciones del profesor Alfonso Victoria, con quien actualmente se prepara para su próxima cita en los Juegos Olímpicos París 2024, a los que ya consiguió clasificar tras ubicarse en el segundo lugar del ranking olímpico de su categoría +80 kilos.

“En el 2014 fui seleccionado nacional juvenil para una competencia en Suecia; nunca había salido del país y lo primero que dije fue: ¡no importa ya estoy aquí, tengo que echarle todas las ganas! Y así gané mi primera medalla de plata”, rememoró el ganador del Premio Nacional de Deportes 2023.

Y así sucesivamente llegaron los premios a su esfuerzo en el Tatami, incluidas las preseas mundiales: “La más emotiva o la más importante en mi carrera deportiva fue la medalla mundial de Guadalajara, en donde me convierto en campeón del mundo; fueron sentimientos encontrados, porque no sólo me pudo ver toda la gente que me apoya, con quien estoy muy agradecido; también pudo estar presente toda mi familia conmigo en una competencia; estuve muy contento de que me pudieran ver como campeón del mundo”.

Las victorias en su carrera deportiva han sido el resultado de su tenacidad, constancia y talento, pero también de grandes sacrificios.

La vida también le regaló a una familia adoptiva, que lo acogió como a uno de los suyos.

Estoy muy agradecido con la familia Rentería, porque ellos no sólo me ayudaron a convivir, también a tener una perspectiva diferente de la vida; ellos me regalaron mi primera ropa formal, los primeros zapatos para salir, me regalaron muchísimas cosas que les agradezco el día de hoy; me abrieron las puertas con toda la bondad del mundo, gracias a su hijo Mariano que entrenaba conmigo”.

Carlos Sansores impresiona a todos con su 1.94 de altura. El taekwondoín mexicano sonríe con todos los que le piden una foto. Con 26 años, su madurez es notoria, pues está a días de vivir sus segundos Juegos Olímpicos y en su historial está el ser triple medallista mundial y doble medallista en Juegos Panamericanos.

El seleccionado mexicano formó pronto su propia familia y en ella encuentra una nueva fuente de inspiración y motivación para dar fuerza a sus objetivos deportivos.

Tengo a mi esposa y a mis tres hijas, unas gemelas de cinco años y la más chiquita de dos, entonces el sacrificio más grande es seguir aquí entrenando por ellas, porque ellas siguen creciendo y no puedo estar siempre presente”.

El “gigante del taekwondo mexicano” contó cómo fue que el combate de los octavos de final en los Juegos Olímpicos Tokio 2020 le cambió la mentalidad, misma que hoy mantiene ocupada y positiva para decretar el sueño que tiene, el de ser medallista olímpico.

Durante la competencia en Tokio, Sansores cayó ante el croata Ivan Sapina con un marcador 6-4 y no entendía cómo fue que perdió debido a la preparación que hizo y al esfuerzo que puso en cada entrenamiento.

“En combate no di todo lo que tenía. Tal vez la situación de la mentalidad y psicológico pienso que terminó con el atleta croata y lo primero que viene a mi cabeza es por qué no gané si trabajé muy duro. Me preguntaba todos los días por qué hasta que decidí trabaje y disfrutar para no preguntar el por qué, sino que así es la vida”, detalló en exclusiva el quintanarroense.

Con un cambio notable en su mentalidad, la meta está clara para París 2024. Hasta el momento, es uno de los dos taekwondoines que estará en la justa veraniega, junto con Daniela Souza, y sabe la responsabilidad que tiene por delante.

Una de las cosas que me planteé en ir es decretar lo que es. No voy obligado a resultado, pero sí lo decreto. Yo voy a ganar, independientemente de lo que pase, si la vida me escucha, ahí estará. Quiero esa medalla y voy a trabajar por ella. El color no lo sé, pero me encantaría darles esa medalla”, admitió Sansores.

Igual que toda la delegación mexicana que está viajando a París para los Juegos Olímpicos, Sansores tiene el deseo muy firme de gana una medalla. Subirse al podio y coronar su trayectoria con la única presea que le hace falta.

Carlos Adrián Sansores Acevedo viajó este domingo a España, para realizar la última parte de su preparación a París 2024, justa que representa su segunda cita en Juegos Olímpicos, tras su paso por Tokio 2020.

HISTORIAL

Carlos Sansores ha ganado 3 medallas en el Campeonato Mundial de Taekwondo entre los años 2019 y 2023, 3 preseas en el Campeonato Panamericano y 2 metales en los Juegos Panamericanos.

FRASES

Una de las cosas que me planteé en ir es decretar lo que es. No voy obligado a resultado, pero sí lo decreto. Yo voy a ganar, independientemente de lo que pase”

“Quiero esa medalla y voy a trabajar por ella. El color no lo sé, pero me encantaría darles esa medalla”

 

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