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- Serán elegidos por voto directo
- Eliminarán cualquier tipo de privilegios
- Se llevarán a cabo juicios más rápidos
Daniel Escobar
La iniciativa de reforma judicial promovida por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), generadora de debates en lo académico y político, y que podría estarse discutiendo el primero de septiembre próximo, contempla varias cuestiones para cambiar esencialmente al tercer poder.
Un aspecto que incluye es el referente a que se elijan juzgadores federales por voto directo de la ciudadanía, para que los cargos de ministros, magistrados y jueces de distrito sean escogidos en las urnas cada tres años. Lo anterior, tomando en cuenta que la duración de estos encargos sería de nueve años, y estos serían propuestas por listas de igual proporción por quien sea presidente, el Congreso, y el mismo Poder Judicial.
Este diario conversó con Mina Moreno, abogada y periodista que ha investigado por años casos de corrupción dentro del Sistema de Justicia mexicano, quien considera que, al elegirse juzgadores por voto popular, se terminaría con el hecho de que este poder esté dominado por un grupo elitista.
“La casta dorada son jueces, magistrados y ministros, la casta dorada no es la única en este país capaz de poder desempeñar un cargo de juez o magistrado, hay mucha gente muy capacitada, muy preparada, que puede buscar a través del voto popular y el contacto con la ciudadanía, poder acceder a este tipo de cargos”, explicó.
Otra cosa que se plantea es reducir la cantidad de ministros y se eliminarían las dos salas en que se divide el órgano. Con respecto a sus percepciones, se establece que lo que ganen los ministros no pueda ser mayor a quien sea presidente, y elimina la posibilidad de que obtengan una pensión.
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