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Por Ana E. Rosete
Mucho han pavoneado los panistas que su fuerte, no solo en la Ciudad de México, sino en todo el país, son los llamados “fifís”. Sí, aquellas personas que pertenecen a la clase media y media alta que jamás se atreverían a votar por la izquierda, porque “¡qué oso!”. Pero les tengo una noticia: muchos de ellos eligieron a Morena como la opción para gobernar la Ciudad de México por los próximos 6 años. Así es, la ruta fue Clara, retóricamente y en lo real.
Veamos. Una encuesta señaló que Brugada logró arrasar con los votos de los “fifís” en la metrópoli. Con este sector obtuvo 4 puntos de ventaja, mientras que el excandidato de la oposición, Santiago Taboada, solo consiguió 45 puntos de preferencia con esta parte del electorado.
Esto quiere decir que la izquierda comenzó a desmitificar el hecho de que los partidos son por clase. No señores, el electorado vota al darse cuenta quién hará mejor uso de los recursos que salen de nuestros bolsillos.
Clara está avanzando y en la carrera más importante ganó, y con una ventaja que para muchos resultó abrumadora, bueno para los panistas. Pésele a quien le pese, sigilosa y tranquila, no necesitó de tantas infamias para lograrlo.
Mi querido Santiago pensó que el desprestigio y la intimidación podrían con ella. Pero se equivocó, pues ahora ella gobernará la entidad más importante del país. Además, tendrá de apoyo 11 alcaldes de izquierda que, sin duda, le harán más digerible el trabajo en la CDMX.
