152 lecturas
ANA E. ROSETE
No hay nada que esperar de Marcela Gómez Zalce, una mujer que no entendió de que se trata el servicio público.
Y lo sé porque la vi trabajar en todo su esplendor en la alcaldía Miguel Hidalgo, liderada en ese entonces por Mauricio Tabe quien busca repetir en el territorio, pero del tiro que se aventará con Miguel Torruco hablaremos después.
La soberbia de la mujer es grande, su forma de ser déspota y altanera le han costado ser acreedora de motes que, por respeto, no escribiré en estas líneas.
Gómez Zalce, como comisionada de seguridad en la MH, dejó mucho que desear; la venta de droga incrementó en colonias como Anáhuac, Agricultura y Argentina; tuvo muertos en San Diego Ocoyoacac, Pensil y en Tlaxpana; se registraron balaceras en Daniel Garza.
Podría seguir hablando de los delitos que fueron en incremento en Miguel Hidalgo, sin embargo, creo que es necesario preguntarse el porqué de esto cuando tienes a una especialista en seguridad con un diplomado en negociación y manejo del conflicto.
Y hablo de ella porque es una de las personas que integró Santiago Taboada a su equipo de campaña al que llamó “La Liga del Cambio”, pero ¿cuál?, si es la misma gata pero revolcada.
La mujer es nada considerada y de acuerdo con muchos trabajadores de la administración panista, si se acercaban a ella o se les ocurría hablarle, se hacían acreedores a un pase directo y sin escalas a la congeladora.
No podemos olvidar que la servidora se ha visto involucrada en temas graves, uno fue la trifulca que se desató en el skate park de Parque Lira, en donde un elemento de la policía fue brutalmente agredido y estuvo a punto de perder el ojo.
Podríamos seguir hablando de ella, pero lo que importa es saber que le suma a la oposición, a mi parecer más bien le resta y mucho.