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Salomón Chertorivski es un personaje al que esta columnista le dedicará el espacio completo. El aspirante a la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, por Movimiento Ciudadano, se vio obligado a sumar a dos mujeres a su campaña porque solo no jala lo que una yunta de bueyes.
Una de ellas es Alejandra Barrales, con quien compitió en el 2018 en la interna del PRD para ser el contendiente y pelear contra Claudia Sheinbaum por gobernar la Ciudad de México. De Sandra Cuevas, la otra, hablaremos después.
Nuestro abanderado naranja le aseguró a sus fieles acompañantes que la publicidad como lonas, gallardetes, posters y demás no son necesarios para volverlo el gobernante de los capitalinos. A los candidatos, que también fungirán de brigadistas, les darán un contador digital de personas para que al final de la jornada manden su respectiva foto con las mil personas con las que tienen que hablar al día, en los puntos que les asignaron como salidas del Metro, lecherías, escuelas y mercados.
Y con eso, aseguró Salomón, se lograrán los dos millones de votos que necesita para que los “fosfo fosfo” mantengan el registro y tengan lugares dónde acomodar los compromisos adquiridos. ¡A ver si es Cherto!
