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En la era Vergara, han salido muchos por la puerta de atrás, como Alexis Vega y Oribe Peralta.
CARLOS HORTA MARTÍNEZ
El Club Deportivo Guadalajara ha batallado de sobre manera para conseguir una figura que cumpla con los objetivos del Rebaño, que es campeonar en la Liga MX.
Alexis Vega y Cristian Calderón llegaron como fichajes bomba para el Guadalajara, Chicote se fue por la puerta de atrás, y después fue a recalar al América, que agarró los deshechos de las Chivas, y Vega cerró su ciclo con el Rebaño, para volver a su ex equipo el Toluca, pero se va sin pena ni gloria, como ha ocurrido con muchos refuerzos en la era de la familia Vergara.
En poco más de dos décadas en las que Jorge Vergara y Amaury han estado al frente del Rebaño Sagrado, la historia se ha repetido en múltiples ocasiones, con grandes fichajes que quedaron a deber como Jared Borgetti, histórico del futbol mexicano y la Selección Mexicana, quien no pudo con la playera del Guadalajara.
Otro delantero probado con experiencia en selección fue Aldo de Nigris, quien tampoco pudo con el reto de portar la casaca de Chivas; lo mismo ocurrió con otros atacantes de menor trayectoria pero que fueron adquiridos como fichajes bomba: Ángel Reyna y Carlos Ochoa.
Juan Pablo Rodríguez, en su pasado estuvo en Atlas y Tecos para después llegar a Chivas, pero su aporte no fue demasiado. Apenas jugó 13 partidos en el Apertura 2006 y dejó al equipo tras esa campaña fallida para después pasar a Santos, donde encontró equilibrio en su carrera. En el Rebaño simplemente no se identificó.
En 2008 Chivas anunció con bombo y platillo el fichaje de Aarón Galindo, el central mexicano era repatriado del Eintracht Frankfurt de Alemania, vivía su mejor momento fuera de México y en Selección Nacional, pero con el cuadro rojiblanco no logró alcanzar su mejor nivel, dejando al equipo en controversia pues demandó por despido injustificado.
Rafael Márquez Lugo aterrizo en el Rebaño, a cambio de e 3 millones de dólares, procedente del Morelia, aunque su carta pertenecía Pachuca. En sus tres primeros torneos marcó 21 goles, pero las lesiones no le permitieron mantener su nivel. En el Clausura 2014 apenas jugó 10 partidos, sin anotar, por lo que para la siguiente temporada decidió retirarse de las canchas.
La experiencia no garantizó el éxito, Luis Pérez, Israel Castro y Fernando Arce llegaron en la era de Johan Cruyff y ninguno de ellos pudo dejar huella. En el Clausura 2016 Chivas volvió a dar un golpe en el mercado anunciado la llegada de Carlos Gullit Peña, que se fue fracasando como rojiblanco.
En la era más reciente Oribe Peralta significó un fichaje “bomba” procedente de América, pero el histórico del futbol mexicano solo pudo marcar un gol con el Guadalajara, siendo uno de los peores refuerzos de la administración Vergara, donde Cristian Calderón y Alexis Vega se suman a la lista de fracasos de grandes fichajes que terminaron siendo fallidos.
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