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ANA MARÍA VÁZQUEZ
@Anamariavazquez
En una nota publicada en abril del 2020 en el periódico Tabasco Hoy, se detallaba la urgencia del FMI para colocar deuda, particularmente en México donde presionaba al presidente López Obrador “el mundo entraría a su peor crisis financiera en los últimos 100 años (…) tenemos que endeudarnos con ellos para “rescatar” la actividad económica”. A la par del FMI, los grandes medios nacionales pugnaban por el endeudamiento ante la “gran crisis” que estaba por venir a raíz de la pandemia. Nuestro presidente no cedió, sabía que ese rescate no era para los pobres y, (continúa a nota) “el presidente ha advertido al Banco de México que tampoco gaste las reservas internacionales pretendiendo “salvar” a peso, como lo han hecho otras naciones”.
De nuevo lo tildaron de loco, de estar arriesgando a la nación y su seguridad, sin embargo, se enfrentó la pandemia sin caer en la trampa del FMI. El resultado, crecimiento, finanzas sanas, tipo de cambio estable y más certezas que pueden verse todos los días en la calle.
Contrario a lo que sucedió aquí, Argentina negoció un refinanciamiento de la ya enorme deuda que cargaba con Macri, Fernández volvió a firmar un nuevo endeudamiento y en su momento pidió a López Obrador que intercediera con el FMI y nuestro presidente pidió que el FMI asumiera su responsabilidad en el excesivo endeudamiento de Argentina, un contrato que según Cristina Kirckner estaba plagado de trampas y era ilegal. Hoy con Milei, de nuevo el FMI tiene la rienda del país, se han recortado las ayudas, el precio de los alimentos, combustible y servicios ha subido indiscriminadamente, la “casta” que prometió el llamado libertario desaparecer, no era la casta política ni la más adinerada, sino la del pueblo, a unos días de la toma de poder de Milei, a quien Xóchitl Gálvez felicitó efusivamente y a cuya ceremonia de toma de poder asistió Eduardo Verástegui (representante de la ultraderecha, corriente del actual presidente argentino), el pueblo comienza a llorar lágrimas de sangre. “Va a empobrecer más al pueblo argentino y a debilitar por completo al gobierno” declaró Obrador.
Nuestro presidente tenía razón, entonces y ahora.
¡Nunca más la derecha deberá volver al poder!