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La Brigada Callejera Elisa Martínez realiza exámenes rápidos a mujeres y trans dedicados al sexoservicio
ANA E. ROSETE
Amairani está esperando los resultados de su prueba rápida de VIH y Hepatitis, tiene un algodón en el dedo de donde la empleada de la fundación “Brigada Callejera Elisa Martínez” tomó su muestra de sangre.
La joven, de no más de 22 años, es trabajadora sexual; ofrece sus servicios en las calles de La Merced, ahí donde la prostitución impera. Diario Basta hizo un recorrido del Eje 1 Norte y su cruce con Circunvalación hasta Manuel Negrete, en estas 10 calles, tan sólo sobre la avenida, se contabilizaron 64 mujeres dedicadas a este oficio; de acuerdo con esta A.C para mediados del 2023 se estima que hay poco más de 15 mil 200 mujeres que perciben dinero de esta manera.
Dos mujeres enfundadas en un chaleco color beige que trae los logos de la asociación civil explican a quienes pasan lo que hacen, ofrecen a diestra y siniestra pruebas rápidas de enfermedades de transmisión sexual; dicen no tener miedo de lo que hacen, les gusta ayudar a la gente.
Están paradas a las afueras de un hotel de paso, ese que no llega ni a 2 estrellas y donde los cuartos se rentan por hora, la cual tiene un costo de no más de 120 pesos; van acompañadas de un hombre que intenta dar información, aunque no sabe mucho del tema ya que a pregunta expresa acerca de las pruebas sólo se limita a contestar, “ahorita te atienden y ellas te dicen bien”.
La mujer tiene el ceño fruncido, como si estuviera enojado y camina de un lado a otro de la acerca peatonal; en menos de 5 minutos preguntó en cuatro ocasiones si sus resultados están listos.
Trae un mayón gris ajustado acompañado de una blusa ceñida a su torso con aberturas al frente que dejan poco a la imaginación de lo que hay debajo, tacones de más de 15 centímetros visten sus pies, está poco maquillada y aún trae el cabello mojado; está nerviosa pues más que el resultado le preocupa perder tiempo para ponerse a trabajar.
Las mujeres de la fundación son claras, la ayuda viene de la licenciada Elisa no de ningún partido político ni institución, lo acotan cada vez que pueden y advierten que no quieren que se confundan con lo que hace Clínica Condesa, hospital de salubridad dedicado a dar atención a quienes tienen una ETS, ubicado en la colonia que lleva su nombre.
Ayudan a mujeres, hombres y trans, lo aclaran y dicen que “todos somos iguales y merecemos ser apoyados”; las zonas en donde aplican las pruebas son Tlalpan, La Merced, La Central de Abastos, Sullivan. Todos los lugares mencionados son sitios en donde se ejerce este oficio, considerado el más viejo del mundo.
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