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Salvador Guerrero Chiprés
En un encuentro dominical con pueblos originarios, Claudia Sheinbaum Pardo recibió el bastón de mando y la confianza de una ciudadanía beneficiaria de las políticas públicas de atención a quienes más lo necesitan, pero también depositaria de expectativas y pendientes.
Un día antes, en el Zócalo se reafirmó la voluntad de la Ciudad de México por ser la ciudad más deportiva, al romper el récord de una clase masiva de box, con 30 mil participantes; el año pasado asistieron 14 mil 299.
¿Inicia o continúa el proceso de unidad ilustrativo de lo que debe hacerse en la ciudad y proyectarse en el futuro del país? Con la voluntad de un robusto y comprometido segmento de Morena, México podrá tener una campeona: la muy entrenada política y científica que comienza sus recorridos rumbo a la encuesta para definir a la “corcholata” encargada de coordinar la defensa de la cuarta transformación. Para la ciudadanía este espacio que durará poco más de dos meses lo es de atenta observación participativa.
Central será el proceso de consolidación que en continuidad encabeza el Jefe de Gobierno sustituto, Martí Batres Guadarrama, quien tuvo el conmovedor acompañamiento de su padre, Cuauhtémoc, y de prácticamente la totalidad de los legisladores al ratificarse la voluntad convergente en su favor el viernes pasado.
Se complementa y se entrega. “Mi querida Claudia Sheinbaum, misión cumplida”, con esa frase en un video, el ex campeón mundial de boxeo Julio César Chávez cerró su participación en la clase mencionada. Con el mismo entusiasmo, la abuela Amalia Salas le entregó el bastón de mando al día siguiente.
Sus resultados posicionan a Sheinbaum como puntera en las encuestas. Su equipo, el cual se queda, redujo hasta 58% los delitos, en la universalización del acceso a derechos. Razones y realismo. De todos los días.
