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Jorge Gómez Naredo
Cuando Andrés Manuel López Obrador llegó a la presidencia de la República, muchos opositores y personas que lo odian dijeron que iba a ser “vergonzoso” que nos representara en el extranjero. Afirmaban que no sabía hablar inglés, que era ignorante, que no respetaba los protocolos, etcétera.
Estas personas piensan que un mandatario surgido de abajo, del pueblo, es incapaz de representar de forma digna a México ante el mundo. Por ejemplo, en junio de 2020, y siguiendo esta lógica, la “analista” política Denise Dresser indicó en Twitter: “¿Por qué al presidente no parece importarle la movilidad social? ¿Por qué se centra en paliar [la] pobreza, pero no crea condiciones para salir de ella? ¿Por qué quiere un país de sembradores y no de innovadores/ingenieros/programadores? ¿Por qué su visión no va más allá de Macuspana?”.
Para este sector de la sociedad, eminentemente clasista y racista, el presidente López Obrador no puede, por el lugar en donde nació, representar a México en el extranjero. Ahora bien, lo que ha hecho Andrés Manuel López Obrador en su gobierno, respecto a política internacional, es de verdad espectacular. Ha sabido lidiar con Estados Unidos, ha interpretado de forma sagaz la geopolítica, y ha estrechado los lazos con América Latina. Esto último es muy importante.
En días pasados se celebró la primera cumbre de la Alianza de Países de América Latina y el Caribe contra la Inflación, una propuesta de López Obrador. En esta cubre se lograron acciones contundentes para bajar los precios de muchos productos, y comenzar a tender relaciones comerciales más fluidas entre las naciones. AMLO no suele salir al extranjero, ni andar en eventos de relumbrón en otros países. Él hace la política internacional desde México y pensando en México, y le ha dado muchos resultados. Sin hacer viajes costosísimos, ha recuperado la dignidad a nuestra política internacional, y el respeto de las naciones a cómo México actúa.
Así pues, los que pensaron que AMLO haría el “ridículo” en el mundo, pues deben estar desilusionados: AMLO hoy es un líder indiscutible en América Latina y un mandatario admirado y respetado en todo el
mundo.