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En 2022, varias alcaldías rebasaron los $200 millones en presupuesto; en múltiples ocasiones el dinero no es ejercido
Javier Villegas
La iniciativa del Presupuesto Participativo (PP) que permite a los ciudadanos proponer proyectos que beneficien a sus colonias, se ha convertido en un pretexto para que los alcaldes se beneficien.
En 2022, varias alcaldías rebasaron los $200 millones en presupuesto; en múltiples ocasiones el dinero no es ejercido o se usa para hacer contratos con adquisiciones a sobreprecio. De acuerdo con la Gaceta Oficial de la Ciudad de México, para el ejercicio del PP 2023, alcaldías cómo Gustavo A. Madero, a cargo de Francisco Chíguil, tendrán disponibles hasta 201 millones de pesos; la Cuauhtémoc, de Sandra Cuevas, 141 millones 528 mil pesos; Álvaro Obregón, de Lía Limón, 134 millones 628 mil pesos; Tlalpan, de Alfa González, 115 millones 473 mil pesos; Miguel Hidalgo, de Mauricio Tabe, 102 millones 325 mil pesos; y Benito Juárez, de Santiago Taboada, 94 millones 902 mil pesos.
Los alcaldes anteriores han sido varias veces señalados por cometer fraudes. Por ejemplo, Lía Limón, Alfa González, Mauricio Tabe y Santiago Taboada, han gastado el PP en cámaras de videovigilancia y luminarias a un sobreprecio hasta diez veces mayor. Sin embargo, los bienes adquiridos a sobreprecio fueron mal instalados al punto en que dejaron de funcionar a los pocos meses de instalados.
La situación fue similar con Santiago Taboada en BJ, quién mandó a su gente a proponer los proyectos ciudadanos para integrar dichos recursos públicos en el programa Blindar BJ. Cabe recordar que este modelo de aparente seguridad está presente en varias alcaldías de oposición: Blindar AI, Blindar MH, Blindar Tlalpan, Blindar Cuauhtémoc y hasta Blindar Azcapotzalco.
