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Jorge Gómez Naredo
Durante años, nos vendieron la idea de que los funcionarios públicos especializados en economía que estudiaban sus posgrados en universidades de Estados Unidos eran de lo mejor. Nos indicaban que ellos sí sabían manejar las variables económicas, que eran unos sabios y que tenían amplias capacidades para tener un país sano en materia económica.
Así, por ejemplo, nos vendieron a Carlos Salinas de Gortari y también a Ernesto Zedillo. Y así nos presumían a los secretarios de Hacienda de los gobiernos de Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto.
Cuando había críticas desde la izquierda a las políticas económicas neoliberales, siempre indicaban: “el que sabe es ese señor que estudió en Harvard o en Yale”.
Así vivimos décadas. Y en esas décadas en que gobernaron esos prestigiosos funcionarios educados en Estados Unidos, el peso fue una de las monedas más devaluadas.
Con Miguel de la Madrid, quien fue el primer presidente neoliberal, el pesó se devaluó más de 1400%. Y así, hubo devaluaciones con Salinas, con Zedillo, con Fox, con Calderón y con Peña. Ahora, con un gobierno de izquierda, el peso, al contrario, se ha revaluado. Y esto ha sido a pesar de que vivimos una de
las pandemias más letales (en todos los sentidos) de la historia, y con un conflicto bélico que ha provocado inflación en todo el mundo.
La oposición debería reconocer el trabajo que en este sentido ha hecho Andrés Manuel López Obrador, y disculparse por todas las mentiras que dijeron sobre él, pues no hay que olvidar que repitieron durante años que si AMLO llegaba a la presidencia, el peso se iba a devaluar.
Disculparse sería lo mínimo que pudieran hacer, si es que tienen algo de dignidad.
