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Ana María Vázquez
Para cuando se den las conclusiones de la investigación por parte de las autoridades universitarias, la reputación de una o más personas puede estar irremediablemente destruida, es cierto que la ministra no se ha quedado callada y desde el primer momento replicó a Latinus sobre el artículo de Sheridan, el control de daños ha sido pobre y malo y la bola de nieve se ha hecho cada vez mayor.
Los expertos en montajes tienen años manipulando a la opinión pública, ya sea para ganar rating o seguir con el golpeteo a la 4T y no dudo que las argucias sean cada vez más elaboradas como, por ejemplo, hackear el repositorio de la UNAM.
Este año sí que ha subido la apuesta de mentiras, de manipulación en la que todos caemos, basta soltar la bomba, esperar a que estalle y después ir poco a
poco dosificando el ácido que contiene para que la opinión pública se “manifieste” y sin ver que está siendo manipulada, juzga y condena a cualquiera
que la publicidad (o los bots) le hayan convencido de que es su propia opinión y pensamiento y no el de la propaganda que ha permeado ya en la opinión
pública.
¿Es de verdad tu voz o solo te vuelves eco de lo que los medios quieren que repitas? Basta arrojar una pequeña piedra a una barranca para provocar
un derrumbe y eso lo saben bien los publicistas. Aquí te dejo algunas claves que utiliza la propaganda para mentir: dice verdades a medias; le da al discurso un halo de lógica y verdad, es decir, parece creíble, pero no hay forma de comprobar por nosotros mismos la fuente; justifica las respuestas con poca información y mucha palabrería; parecen honestos; se apegan a su historia y no saldrán de ahí porque todo se derrumbaría.
La mentira y la manipulación ha tenido su mayor auge con la tecnología, pero hay cosas que no cambian, como el hecho de que muchos terminan
creyendo sus propias mentiras y basta ver el auge que han tenido algunos coaches de lenguaje no verbal o series como “Lie to me”, y aunque no podemos poner el polígrafo a cada medio, lo que si podemos y deberíamos hacer es tomarnos un momento para reflexionar sobre una nota antes de caer en la vorágine del “trending topic” hasta olvidarnos de que TODOS SOMOS INOCENTES HASTA QUE SE DEMUESTRE LO CONTRARIO.
