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Salvador Guerrero Chiprés
Las acciones policiales recientes contra grupos criminales en la Ciudad de México tienen efecto nacional. Un impacto favorable estará situado en Cancún.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana de la CDMX desarticuló un grupo de extorsionadores a comerciantes, el cual operaba en las alcaldías Venustiano Carranza y Cuauhtémoc, a quienes exigían hasta 100 mil pesos.
Esta organización criminal, de acuerdo con los datos expuestos por el secretario, Omar García Harfuch, reclutaba personas para perpetrar homicidios en Quintana Roo, a quienes les pagaban gastos de hospedaje.
Fortalecer las labores de inteligencia y dotar de facultades para transformar a la policía preventiva en una de investigación, son elementos clave en la identificación, persecución y captura de generadores de violencia. Varias entidades, especialmente las mayoritariamente cercanas a Morena, observan los operativos y la integridad de la política pública de seguridad.
La coordinación entre la Fiscalía General de Justicia, encabezada por Ernestina Godoy, y la SSC, genera resultados que en la CDMX impactan en una reducción en delitos como el homicidio doloso, las extorsiones u otros relacionados con la operación de grupos delictivos de alto impacto o el robo de autos.
Cancún resultará beneficiado de la estrategia de seguridad pública impulsada en la capital nacional por la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, un efecto que incluso podría extenderse más allá.
Reconocer la labor de los cuerpos policiales es central. Lo es también el conocimiento de la cooperación. El alcalde en Miguel Hidalgo, Mauricio Tabe, lo dijo así: “La seguridad debe ir más allá de los colores”. Celebró este martes el trabajo de 48 policías para reducir en 59% los delitos de alto impacto. Inteligencia, investigación y coordinación son elementos que tendrán un efecto desde la CDMX y todas sus alcaldías, para el país.
