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Ana María Vázquez
Una mina que comenzó a operar en Coahuila hace escasos siete meses, colapsó dejando atrapados a 10 mineros; es inevitable no recordar el incidente de Pasta de Conchos, en febrero de 2006, en Sabinas, Coahuila en la que quedaron atrapados 65 mineros.
En ese entonces, el Primer Mandatario, Vicente Fox, y el entrante, Felipe Calderón, negaron el apoyo federal y los mineros no fueron rescatados… hasta la entrada de este gobierno.
Una de las instrucciones de Andrés Manuel López Obrador fue el rescate de los cuerpos que permanecían ahí, esperando justicia; 16 años después del incidente, en febrero de este año se inició la recuperación de los cuerpos. Contrario a aquel aciago 2006, el mismo día del incidente en Coahuila, la Guardia Nacional, junto con los llamados binomios caninos y buzos de Fuerzas Especiales, se aprestaron al rescate con 230 elementos.
Día a día se muestran las diferencias entre este y otros gobiernos, aunque los medios masivos se empeñen en esconder la realidad; ha sido un sexenio de rescates: petróleo, minerales, tierras, minas, personas y por supuesto el país mismo. Frente a los latrocinios de grupos grandes y pequeños en el poder de otros sexenios siguen saliendo a la luz, los rescates continúan.
El derrumbe del miércoles cimbró más de una conciencia, hasta ahora los responsables de la mina de carbón Las Conchas permanecen en el anonimato oficial y en Villa Agujita, sitio exacto del derrumbe, la gente sigue esperando a que los mineros atrapados puedan ser rescatados con vida.
El colectivo Pasta de Conchos ha denunciado que tres pozos no fueron inspeccionados por la STPS y que estos permanecen inundados hasta 30 metros; los barrenos que permitirían identificar los cuerpos de agua o gas no se realizaron, arriesgando más todavía la labor de los mineros. En su denuncia, el Colectivo también señala que desde 2006, otros 122 mineros han perdido la vida en diversos accidentes que no fueron adecuadamente previstos.
Se nombra al político y empresario Régulo Zapata Jaime como el propietario de la mencionada mina a quien la CFE otorgara recientemente un contrato por 55 millones de pesos para abastecer de carbón a la carboeléctrica “Carbón II”, del municipio de Nava,
Coahuila; Zapata Jaime sería el directo responsable del siniestro ya que no realizó trabajos de barrenación.
