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Durante su gira de trabajo en Tlaxcala, el presidente destacó el plan de Salud IMSS-Bienestar, que ayudará en situaciones críticas de salud, como los ataques cardiacos
Redacción Grupo Cantón
El presidente, Andrés Manuel López Obrador reconoció que en diciembre de 2013, cuando le dio un infarto al corazón, llegó a resignarse por tanto dolor que sentía.
Lo anterior, lo dijo durante la supervisión del plan de Salud IMSS-Bienestar en Huamantla, Tlaxcala, que tras la atención brindada en la pandemia de Covid-19, se retomó el plan original de mejorar el sistema de salud, el cual incluye el rehabilitar hospitales, contar con especialistas, medicinas y basificar al personal médico.
Acompañado de la gobernadora Lorena Cuéllar e integrantes de su gabinete, el primer mandatario destacó que Tlaxcala es de los primeros estados que se suman al modelo IMSS-Bienestar.
“Se tienen avances, pero nos falta todavía para atender cualquier padecimiento y equipar las áreas de urgencias para atender infartos”, dijo.
Asimismo, destacó la importancia de que se tenga en Tlaxcala equipo especializado para realizar cateterismo.
“Es una especialidad, lo que es la cardiología, el intervencionismo, les hablo de esto porque yo lo padecí y me salvé porque me atendieron a tiempo”, comentó.