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Diego Elías Cedillo
Si esta columna hubiese sido escrita 60 años atrás, allá por 1962, seguramente este tecleador estaría narrando sobre el plan del expresidente estadounidense John F. Kennedy para conmemorar el cumpleaños 36 de la famosa actriz Marilyn Monroe.
Será acaso que el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno, desde su óptica, imagina que aún se encuentra en esa época y aspira a obtener una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood con su nombre. Lo anterior, ante el bochornoso audio que el campechano difundió ayer mediante sus redes sociales, en el cual presuntamente es amenazado por el senador del Partido Verde, Manuel “El Güero” Velasco.
Acaso el segundo capítulo de la paupérrima novela escrita por el priísta Moreno Cárdenas será cuando su hijo -ahijado del exgobernador chiapaneco, Velasco Coello- le pregunte sobre la traición de su compadre, y el aún “dirigente” tricolor narre otra perfidia historia.
Seguramente ante dicha actuación, Eugenio Derbez y Carlos Loret de Mola pronto acudirán a Alito para pedirle consejos sobre montajes.
Y hablando de puestas en escena, alguien avísele al dirigente nacional del Sindicato de Ferrocarrileros, Víctor Flores Morales, que de vez en cuando es bueno salir a la escena pública, ya que un grupo disidente de su agrupación asegura que el aumento al robo de ferrocarriles obedece a la avaricia de su líder.
Con el oscuro pasado que mantiene el jarocho conductor de Tren, Víctor Félix, más de un mexicano lo confunde con Álvaro Obregón, ya que cuando el expresidente perdió su brazo en la Batalla de Celaya y los soldados lo andaban buscando, el militar sonorense ordenó a sus comandantes sacar un real de oro, para que su mano por mutuo propio brincará para agarrarlo. Lo curioso radica en que minutos después el brazo apareció.
POST-IT
¡Aguas!, estimadas y estimados lectores, cuando caminen por la fifí zona de Polanco y en particular por el parque Uruguay, en la alcaldía Miguel Hidalgo, ya que Mauricio Tabe, edil de dicha demarcación, gusta transitar por allí -en especial los viernes- en un estado no tan lucido. ¡Salud!